El diario británico The Guardian dio a conocer que la obra es del artista italiano Paolo Porpora y está valuada en US$1.5 millones.
Las cámaras de seguridad del recinto captaron el momento en que el joven, con una bebida en mano, tropieza con una tarima con cordón de seguridad que resguardaba el cuadro y se recarga en éste para no caer.
Una vez hecha pública, la grabación se viralizó en las redes sociales.
De acuerdo con la prensa local, los organizadores de la exposición no interpondrán cargos ya que la obra, que pertenece a una colección privada, está completamente asegurada.