La pata llega volando al patio, que está cercado, y los niños pueden verla desde las ventanas de sus salones. Vanessa llega hasta un arbusto específico, cava su nido y deposita sus huevos. Y se queda ahí con ellos hasta que rompen el cascarón.
Después de que salen, los patitos caminan por un pasillo que gente de la escuela forra de papel para que las aves puedan salir a un estanque cercano.
Los maestros y el personal se aseguran de que los estudiantes no se atraviesen para que Vanessa no se asuste.
“Es muy inusual, pero a todos les interesa esta pata por cómo es y porque regresa cada año”, dijo Elizabeth Krause, una mamá que ha visto a la pata recorrer el pasillo casi cada año.
Este año, el recorrido ocurrió el jueves. La pata esperó en el patio a que abrieran la puerta y guió a sus polluelos por la escuela en cuestión de minutos.
“Hasta ahora lo ha hecho 13 años”, afirmó Darrah.
- VIDEO que muestra parte del recorrido que hacen la pata y sus polluelos en la escuela, publicado por Livingston Daily Press & Argus of Howell