“El artículo del New York Times es impreciso e incorrecto en cuanto a los hechos. No voy a comentar más sobre una información basada en fuentes anónimas que están obviamente motivadas políticamente contra el departamento y que quieren imponer su propia agenda”, rechazó Rosenstein en un escrito difundido por el Departamento de Justicia.
El mecanismo en cuestión es la Enmienda 25 de la Constitución, por la que se puede deponer a un presidente por considerarlo incapaz de ejercer el cargo y que implica que el vicepresidente tome el mando tras conseguir el apoyo de dos tercios del Senado.
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El número dos de Justicia también precisó que no cree que Trump esté incapacitado.
“Déjenme ser claro: basándome en mis contactos con el presidente, no hay base para invocar la enmienda 25″, incidió Rosenstein.
Las declaraciones del vicefiscal a las que se refiere el The New York Times se habrían producido cuando el presidente despidió al director del FBI, James Comey, en mayo del 2017, supuestamente tras pedirle “lealtad” para “dejar ir” una investigación contra un cargo de Trump, según la versión del propio exdirector del buró.
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La noticia, rechazada por Rosenstein, se enmarca en un contexto en el que éste ha sido fuertemente criticado por el presidente por cómo ha gestionado la supervisión de las pesquisas de Robert Mueller, el fiscal especial de la trama rusa sobre supuestos contactos de la campaña de Trump con el Kremlin en las elecciones de 2016.
La información sobre Rosenstein, que sería el encargado de un posible despido a Mueller, llega en un momento en el que la investigación parece avanzar significativamente tras conseguir la cooperación del exjefe de campaña de Trump, Paul Manafort, y haber terminado de explotar la colaboración con tres de los imputados.
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