Ambos fueron trasladados al Hospital de Vida Silvestre del Zoológico de Australia, donde reciben con amor los cuidados y atención de los trabajadores.
Los veterinarios coinciden con que los abrazos de Phantom contribuyeron a mejorar el estado de salud de Lizzy, quien continúa recibiendo antibióticos, mientras que él no se separa de su cuello.
El hospital ha atendido a 58 mil animales silvestres en sus 11 años de servicio. El tratamiento promedio de un koala oscila entre los US$1 mil 500 y US$5 mil.