Para declarar su amor eterno, los recién casados enfrentaron una serie de adversidades como temperaturas frías, malestares físicos por el aumento de presión en la atmósfera, tuvieron que desplazarse por terrenos peligrosos.
Luego de tres semanas de recorrido llegaron al campamento base del Everest, a 5 mil metros de altura, donde intercambiaron sus votos matrimoniales. Se desconoce quién ofició la ceremonia.
“Nos hubiera encantado compartir este día tan especial con nuestra familia y amigos, pero a ambos nos gustaba la idea de casarnos durante unas vacaciones increíbles”, dijo al novia a el Daily Mail.
El viaje de la pareja fue documentado por Charleton Churchill, un fotógrafo conocido por retratar “bodas de aventura”, quien compartió las fotos en sus redes sociales.