Pérez se declaró culpable en agosto de posesión de documentos obtenidos ilegalmente, reingreso ilegal al país y revelación ilegítima de un número de Seguro Social.
La fiscalía dijo que el acusado convenció a una corte en California para que cambiara el nombre de su víctima de robo de identidad.
Armado con esa orden judicial, cambió también a su nombre el certificado de nacimiento de la víctima en California. Utilizó entonces esa identidad para recibir cupones para alimentos, Medicaid, un pasaporte estadounidense y licencia de conducir.
“Este es claramente un caso extraordinario”, dijo el juez.“Nunca había tenido un caso como este”.
Su abogado, David Freund, argumentó que su defendido tenía poca educación y recibió “muy malos consejos” de un notario en California sobre cambiar el nombre de la víctima.
El notario fue arrestado y sentenciado por robo de identidad, dijo, y añadió que los notarios a menudo se aprovechan de inmigrantes poco educados, ofreciéndoles esperanza.
“Yo pensé que yo era legal” , dijo Pérez a la corte. “Pensé que estaba bajo protección del juez” .