DESARROLLO DE PAÍS
Elección presidencial en Brasil
Al medir el tamaño de la economía de cada país por el producto interno bruto anual, Brasi es la decimosegunda economía del mundo, la segunda de toda América y la primera de América Latina. Es un país con un potencial de crecimiento para ser de las mayores 10 economías del mundo si tienen estabilidad política, reglas claras, certeza jurídica y fomento a la producción. En Brasil se estima una población de 211 millones de habitantes con un sistema republicano federalista donde eligen cada cuatro años a sus gobernantes y legisladores.
El PIB per cápita nominal se estima en US$7 mil, con una población por debajo de la línea de la pobreza de 30%. Es un país en vías de desarrollo donde la agricultura y la agroindustria destaca mundialmente en productos como la caña de azúcar, el café, la soya (frijol, harina y aceite vegetal), la carne y la leche bovina, y otros, pero también en la industria como la aeronáutica, metalúrgica, carbón, petróleo, etanol, cemento, electrónicos, productos de consumo, calzado, automóviles, etc. Exporta a China, Estados Unidos Argentina, Países Bajos, Alemania, Canadá, Japón, España, México, Chile, Corea del Sur, Singapur, Malasia y varios más. Exporta (US$214 mil millones) más de lo que importa (US$160 mil millones).
Las elecciones presidenciales de segunda vuelta dieron el triunfo, aun no concedido por el actual presidente Jair Bolsonaro por investigación de fraude electoral, a Luiz Inácio da Silva (Lula), el obrero metalúrgico, sindicalista y progresista fundador del Foro de Sao Paulo en 1990. Lula fue presidente de la República en dos períodos consecutivos de 2003 a 2010. Además, estuvo encarcelado por acusaciones de corrupción en 2017 (incluido caso Odebrecht), pero liberado en 2019, tras 580 días de encierro, por un juez de la Corte Suprema de Justicia quien le anuló en 2021 todas las sentencias dictadas. Según el Tribunal Supremo Electoral, Lula obtuvo 50.9% de los votos. Sin embargo, desde el día siguiente iniciaron las protestas pacíficas de seguidores de Bolsonaro, reclamando fraude electoral y se especula que hoy, lunes 7 de noviembre, se presentarán las pruebas.
' Desde el día siguiente iniciaron las protestas pacíficas de seguidores de Bolsonaro.
José Santiago Molina
En la primera vuelta (2 de octubre), Lula da Silva obtuvo 48.43% de los votos mientras que Bolsonaro obtuvo 43.2%. Es importante saber que a nivel de elecciones legislativas el gran ganador fue el Partido Liberal (Bolsonaro), por lo que en el Senado y en el Congreso tendrán mayoría, mientras que a nivel de gobernadores estatales el partido de Lula solo tuvo 10 de 27 electos, teniendo los liberales triunfos en estados claves como Sao Paulo y Rio de Janeiro, y varios más; es decir, la mayoría de los gobiernos estatales.
Brasil, al igual que la mayoría de los países en América Latina, está muy polarizado y eso es producto de la narrativa de la izquierda de base castrochavista, de donde Lula es parte fundadora versus la propuesta de los conservadores que gobiernan con realidades económicas buscando marcos jurídicos y planteamientos de inversión adecuados para desarrollo de cada país. Una realidad es que las acusaciones y pruebas en Brasil de corrupción del gobierno de Lula y de su sucesora Dilma Rousseff como han sido en Venezuela, Argentina, Bolivia y en otros países que siguen el castrochavismo.
Desafortunadamente la medalla de corrupción también la hay en gobernantes de derecha como Juan Orlando Hernández, de Honduras, y unos más. En el continente hay una clase política muy desprestigiada por corrupción. Debemos luchar todos para que sean electas personas con historial de decencia, respetados en la sociedad con gestión positiva evaluable en lo que se han desempeñado y propuesta seria de desarrollo de país con programa sustentado. Hay que tener cuidado con las narrativas, las falsas promesas y campañas políticas agresivas sin propuesta.