REGISTRO AKÁSICO
La madurez electoral
Javier Milei ha triunfado en la Argentina, es una voz fresca y novedosa, retirada de la política de la corrección. También se aparta de los consensos de los poderes financieros internacionales basados en el endeudamiento de las naciones latinoamericanas para mantenerlas en postración. En el vecino El Salvador, el presidente Bukele no ha dejado de sorprender con su decisión y rechazo de la intervención del deep state. El presidente Zelensky, de Ucrania, parecía un cómico de la televisión. Sin embargo, sostiene la soberanía y lidera la defensa de su patria frente a una invasión ilegal y no provocada.
En nuestro país, la candidatura más votada podrá proponer un camino nuevo e independiente, o seguirá con el mismo discurso cansado y agotado, bajo sanción de los poderes hegemónicos mundiales. El Congreso habrá de frenar al nuevo gobierno solicitándole primas de cuanta obra pública se haga, los alcaldes le cobrarán su acostumbrada gabela para evitar bloqueos, griteríos e invasiones de propiedades privadas, así como la huida frente a la delincuencia más vil, de quienes deben controlarla. Las huelgas de los empleados públicos impedirán la concordia y la paz, necesaria para desplegar el plan de gobierno. En fin, el nuevo gobierno entra en un laberinto.
Todo puede cambiar. Con decisión y patriotismo, se puede conseguir la redención nacional. Al acudir a votar, sostenemos la ilusión de redimir al país, conseguir un futuro democrático beneficioso para el trabajo y de realización de las garantías constitucionales. El voto entrega esa confianza, el reclamo para mejorar, la seguridad del buen uso de los recursos nacionales, el ejercicio independiente de la soberanía y la mejora de la economía nacional. La mayoría espera se concreten las promesas anunciadas.
' La representatividad resulta de un ejercicio sumatorio no exento de influencias y manipulación.
Antonio Mosquera Aguilar
¿Cabe la decepción? Por supuesto, pueden estar muy altas las expectativas y a quien resulte en el cargo se le haga difícil avanzar. Muchos proponentes creen conocer la naturaleza de la persona candidata y confían en rodearla, neutralizarla y apartarla de la gente de bien. Además hay muchas serpientes arrastrándose, a la espera del negocio preparado con su gavilla. Los proyectos de gobierno manipulados en secreto están preparados. El entramado delictuoso ya está armado en ambos partidos enfrentados; no son dos grupos con integrantes llenos de pureza y buenas intenciones. En cada agrupación política, se localizan a las raposas preparadas para saltar sobre su presa, tienen diseñados los términos de referencia, los auditores cómplices y anunciado el reparto. También para confundir a la opinión pública tienen dispuestos los escándalos que extravían la atención, desvían el foco de atención, para esconder su ruindad.
Ya se tuvo el primer intento de confusión, al indicar el resultado de la primera vuelta como sorpresivo, no anunciado o sin patrocinadores. Al final, salieron y se conocen quienes estaban atrás, tanto a favor como en contra. Mal hicieron en esconder la composición de observadores y comentadores, de financistas y propagandistas; de bobos engreídos y listos, acaparando el poder local; de manipuladores religiosos e ingenuos fervorosos fundamentalistas; o de quienes arrastran las siglas, hasta hacer desaparecer partidos; de todo hay. Así funciona la democracia de verdad, para apoyar la representatividad con reglas, se necesita de un mínimo de exposición de los actores involucrados.
Esperemos éxito en la jornada, limpieza en el recuento y aceptación cívica del resultado. No es el fin de ningún camino, ni logro exitoso, solo es el anuncio de la designación de una nueva ilusión.