NOTA BENE
Las leyes de aborto en la picota
Se estima que 62 millones de bebés han sido abortados en Estados Unidos desde que la Corte Suprema legalizó el aborto en 1973. Constituye un promedio anual de 1.291,666 bebés, un dato comparable al promedio anual de las víctimas del Holocausto, pues entre 1941 y 1945 el régimen Nacional Socialista de Alemania mató a aproximadamente 6 millones de judíos.
Bajo Vladimir Lenin, la Unión Soviética fue el primer país en legalizar todos los abortos en 1920. Gradualmente, otros países admitieron los abortos en caso de violación o cuando corría peligro la madre. En 1935, las mujeres alemanas pudieron abortar si tenían un desorden hereditario, o para contribuir a la pureza de la raza. La tendencia se expandió y ahora el aborto es legal en 64 países. Un cuarto de los niños concebidos enfrentan este tipo de muerte, según el Population Reference Bureau. PRB estima que cada año se interrumpen 56 millones de embarazos deliberadamente. El Worldometer reporta más de 40 millones de abortos en lo que va del 2021.
' Texas y Mississippi retan el criterio federal.
Carrol Ríos de Rodríguez
Hoy, Estados Unidos figura en las noticias porque la Corte Suprema podría revertir el criterio jurídico que aplicó el 22 de enero de 1973, en el famoso caso de Roe contra Wade. Durante 48 años, las decisiones de la corte reiteraron la idea central de Roe: las mujeres tienen un derecho constitucional a abortar durante los primeros dos trimestres del embarazo. Suponían entonces que un bebé menor de 24 semanas no sobreviviría fuera del útero, pero hoy sabemos que entre 60 y 70 por ciento de ellos sobrevive. En opinión de siete de los nueve magistrados, las restricciones impuestas al aborto por algunos estados de la federación eran inconstitucionales. Uno de ellos, Harry A. Blackmun, argumentó que serían contadas las situaciones bajo las cuales un estado podría justificar reglas que limitaran el derecho a la privacidad de la mujer. Jane Roe es el nombre ficticio que se dio a Norma McCorvey, fallecida en el 2017. Al tomar acción legal contra el fiscal de distrito de Dallas, Henry Wade, McCorvey sostuvo que su derecho a abortar era absoluto, con base en su privacidad.
Casi medio siglo más tarde, la Corte Suprema dejó en lugar una estricta prohibición al aborto en Texas. Aprobada en septiembre, la “ley del latido de corazón” protege la vida del bebé una vez se detecte la actividad cardíaca, es decir, alrededor de la sexta semana. Es la legislación provida más fuerte aprobada desde 1973. Aún se podría modificar dicha ley, pues los magistrados permitieron que varias impugnaciones legales sigan su curso, entre ellas una interpuesta por proveedores de abortos.
Además, la Corte Suprema analiza una ley de Mississippi que prohíbe los abortos después de 15 semanas de embarazo. Este caso implica devolver a cada estado la decisión de cómo proceder en cuestiones de abortos. Los tres nuevos magistrados nominados por Donald Trump —Neil Gorsuch, Brett Kavanaugh y Amy Coney Barrett— parecen favorecer la postura de Mississippi.
Aprobada en la cúspide de las leyes de derechos civiles, Roe ha causado división social y política en Estados Unidos, afirma Daniel Henninger, de The Wall Street Journal.
Mississippi está forzando a la clase política y al organismo judicial a reevaluar el mensaje de Roe. ¿Es Washington realmente el centro de la autoridad moral nacional, o pueden los gobiernos estatales decidir cuestiones como el contenido curricular en las escuelas, cuestiones de identidad de género, políticas de vacunación y de aborto? Henninger quisiera ver el poder de toma de decisión devuelto a los estados, y yo concuerdo. Y además espero que se haga historia y se proteja el derecho a la libertad y la vida de todos los seres humanos desde el momento de la concepción.