ESCENARIO DE VIDA

El reto más grande de la humanidad

Vida Amor de Paz vidanicol@gmail.com

|

Con mi presente columna, espero poder ampliar el panorama de mis lectores sobre el reto más grande que jamás ha tenido la humanidad. Me dirijo a ciudadanos de a pie, empresarios, agricultores, amas de casa, comerciantes, académicos, campesinos, políticos, diputados y gobernantes para que redoblemos la acción y estemos preparados.

En la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático-COP 22 celebrada hace una semana en Marruecos, se hizo hincapié, que hace tan solo poco más de un año estábamos a un grado más de temperatura, pero que curiosamente ya habíamos llegado a 1.02 grados más. Esto viene a reconfirmar que los pronósticos adversos vienen mucho más acelerados de lo que los científicos jamás imaginaron. Por ejemplo, se decía que durante el verano, el Ártico quedaría libre de hielo para finales de siglo, ¡pero ahora está sucediendo 100 años antes! Con tan solo 2 grados más peligrará nuestra agricultura y nuestros bosques.

Los fenómenos climáticos extremos de Centroamérica son espeluznantes. El 47% (21 millones) de centroamericanos vive en condiciones de pobreza y el 18% (8 millones), en condiciones de pobreza extrema y eso aumenta la vulnerabilidad. La Licda. Alejandra Sobenes, del equipo técnico de financiamiento climático para América Latina y el Caribe (GFLAC), nos hace llegar un pronunciamiento que resumido dice: a) debemos implementar la Estrategia Regional Centroamericana de Cambio Climático, b) priorizar la adaptación a los fenómenos hidrometeorológicos extremos, c) proceder a la asignación de recursos públicos y a la elaboración de las propuestas de acompañamiento del Fondo Verde del Clima, d) la pronta implementación de mecanismos nacionales y regionales orientados por el mecanismo internacional de Varsovia para paliar las pérdidas y daños.

Según GFLAC, en una sola semana vivimos fenómenos como el Huracán Otto que generó impactos sobre Costa Rica, Nicaragua y Panamá, y el terremoto en las costas de El Salvador y Nicaragua, más el incremento de la actividad volcánica en Guatemala. Todo ello es una prueba que debemos ser considerados “particularmente vulnerables” y no permitir que nos pongan dentro del “montón” de otros países vulnerables, pues al hacerlo se debilitan nuestras posibilidades de obtener financiamiento. Quizás no sepan que somos países en desarrollo con ecosistemas frágiles, con regiones montañosas, zonas semiáridas, expuestas a la sequía, y propensas a los desastres naturales, sumado a la pobreza.

Según el Arq. Jorge Cabrera asesor de AILAC, debiéramos contar con el más alto compromiso político ante el cambio climático, con fundamento en la ciencia y la evidencia; un llamado a la solidaridad con los países más vulnerables, un reto a los países con mayores emisiones de gases de efecto de invernadero para incrementar la ambición como un asunto urgente, a incrementar y facilitar los flujos financieros con el compromiso de movilizar la meta de 100 mil millones de dólares a la transformación de la tecnología y el fortalecimiento de las capacidades y al involucramiento de actores no gubernamentales.

La Ing. Silvia Zúñiga, directora de Cambio Climático del MARN, menciona que Guatemala ha regresado de la COP 22 con un portafolio lleno de proyectos que interesaron a la comunidad financista internacional.

Nos queda el mensaje claro que no hay marcha atrás en el Acuerdo de París, ni aunque Donald Trump lo quiera echar al basurero, pero si lo hace, Estados Unidos podría sufrir de una demanda, pues la acción climática se sustenta en la ciencia y la evidencia. Felicitaciones al ministro del MARN Dr. Sidney Samuels. www.tropicalrainforest.org

ESCRITO POR:

ARCHIVADO EN: