SIN FRONTERAS
Esto nos pasa
Pregunta él, lo dice: ¿qué les pasa? Gesticula y articula, comunica que no logra comprender. Cierta su duda o no, y sobreactuada como es su discursiva, me permito, brevemente, dar una explicación. Y es que esto, señor, como lo entiendo, es lo que nos pasa.
Somos ciudadanía, plenamente identificada con las acciones emprendidas por don Iván Velásquez en el país. Desde aquel abril, cuando inició su cruzada en contra de poderosas redes de corrupción e impunidad, que vivían y existían protegidas por poderes inalcanzables, nació una fuerte ilusión en lo más profundo de muchos de nosotros. Nos alentamos en la posibilidad de una Guatemala bajo el imperio de la Ley, para todos por igual. Y ponemos resistencia a retroceder al modelo de privilegios heredado, que resulta en una desigualdad inaceptable. Somos, la gente, su oposición, presidente. Porque le vemos inevitablemente buscar refugio en fosas oscuras, en los enemigos sempiternos de la humanidad. En las fuerzas armadas, en las guerras, en la supresión deliberada de las libertades.
Somos emprendedores. Muchos de quienes le oponemos somos hombres y mujeres que madrugamos día a día, para abrir tienda, atender clientela, para laborar. Preocupados vivimos por lograr la chamba que nos dé los pesos necesarios para poner sobre la mesa un pollo y el arroz. Y buscamos prosperar, así, pensando cada día en el futuro de nuestras familias. Pero enoja y avergüenza conocer que embajadores a su servicio son enviados al exterior, con fábulas y ficciones, de que su oposición es comunista. Nos sentimos aminorados en nuestro esfuerzo por lograr un país viable y sostenible.
Tenemos orgullo de país. Y ponemos resistencia a una diplomacia a la que no le preocupa hacer papelones internacionales, poniendo en ridículo el nombre del país. Conocemos que hay otro camino, que buenos profesionales de la diplomacia construyeron antes que los suyos. Y nos apena ver que los espacios duramente ganados por ellos, estén hoy en riesgo, tal como lo explicó esta semana el embajador Francisco Villagrán, en su artículo titulado “El nuevo alineamiento con Estados Unidos”. Creemos en positivo que la cruzada del doctor Velásquez Gómez, y de todos quienes a él le apoyamos, es un modelo internacional que puede replicarse, y que debe catapultar a Guatemala hacia un papel protagónico en la era mundial contra la corrupción.
Defendemos, en lo más alto, nuestro sagrado derecho de expresarnos y de ser informados. Y rechazamos, de forma recia, los embates peligrosos emprendidos por los suyos en contra de la libertad de expresión. Demasiadas personas de la más alta calidad humana, como la recién partida señora Ileana Alamilla, dedicaron su vida para permitir que ningún tirano, por obstinado que sea, pueda limitar la voz de quien quiera hablar, decir, escribir y comunicar.
Sabemos que luchar contra las mafias en un Estado débil, es una tarea de enormes proporciones. Tememos que por cada paso que se dé hacia delante, se pueden retroceder otros más. Nos preocupa el poder del Ejecutivo concentrado en alguien que está desalineado con nuestra motivación. La próxima designación del Fiscal General y superintendente tributario y tantas otras decisiones. Nos frustran sus conexiones, sus motivaciones y su visión del país. Por eso, pregunta usted, y nos dice: ¿qué les pasa? Le respondemos que somos su oposición. Somos el pueblo no somos indiferentes a sus acciones. Esto, señor, como lo entiendo, es lo que nos pasa.
@pepsol