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Alza en los combustibles: Cómo golpea los presupuestos de los pequeños negocios (y cómo enfrentarla)

Las Mipymes son más del 90% de la empresarialidad guatemalteca y cuentan con pocos recursos para soportar los aumentos de precios de materias primas e insumos.

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Precio del petróleo golpea a Mipymes en Guatemala

El precio de las gasolinas superior y regular han experimentado una rebaja en las últimas semanas. (Foto Prensa Libre: EFE)

Los efectos de la pandemia del COVID-19 motivó a las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) a cambiar su estrategia de ventas, llevando sus productos a la puerta de la casa de sus clientes. Sin embargo, el incremento constante de los combustibles ya les está cobrando la factura, principalmente a quienes fundaron y trabajan en una pequeña empresa familiar.

Por ejemplo, hace un año Joel Pérez inició su propio negocio de venta de desinfectantes, los que adquiere en la zona 4 de la capital y distribuye en varias residencias del municipio de Mixco y en el mercado La Florida. No obstante, su preocupación ahora es que le alcance la gasolina para el servicio a domicilio, realizar sus compras y trasladar a sus hijos a la escuela.

Así como él, miles de pequeños y medianos empresarios empiezan a tener complicaciones económicas a raíz del conflicto internacional entre Rusia y Ucrania, que es lo que ahora indican los empresarios como causa principal del encarecimiento de los combustibles.

El 28 de febrero, los precios de los carburantes en el país estaban eran de Q34.86 por galón de súper; Q34.23 por el de regular; y Q31.07 por el de diésel, en la modalidad de servicio completo. Este jueves, la misma unidad de media ya costaba Q37.14, Q36.55 y Q34.25, respectivamente.

Esta escalada tendrá un impacto evidente sobre las pequeñas empresas, integradas por familias que mezclan las finanzas del hogar con las del negocio, por lo que está en riesgo su capital de trabajo, opina David Casasola, director de Investigaciones del Proyecto GEM Guatemala, de la Universidad Francisco Marroquín.

“Considero que las autoridades deben identificar los principales sectores de riesgo del país, ya que es posible que esta escalada continúe y que al final, afecte el bolsillo de los consumidores. Incluso, ver los programas que se impulsaron por la pandemia porque hay que aprender de ella y priorizar en función de las necesidades, para atender temas de nutrición, pobreza extrema y evitar la pérdida de más empleos”, opinó.

De acuerdo con cifras más recientes, la economía guatemalteca se compone de más de medio millón de Mipymes, o sea, más del 90% de empresas a nivel nacional.

Precios afectan su logística

Con la pandemia, las mipymes empezaron a reinventarse y a buscar otras formas de supervivencia. Una de ellas fue acatar el distanciamiento social y atender a sus clientes en sus viviendas, una nueva forma de logística que está siendo afectada, opina al respecto Édgar Balsells, del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos (IPNUSAC).

“En esta fase de conectividad, lo que hay es una nueva logística, gente que tiene su negocio familiar y que usa su carro para comprar productos e ir a venderlos. Por ello, este aumento de los combustibles les afecta mucho”. Y añade que en el país, lo que no hay son mecanismos de control que velen por evitar la especulación de los precios y la protección al consumidor.

Mipymes todavía se recuperan

Con relación a las empresas, especialmente las mipymes, debe recordarse que en muchos casos, aún se están recuperando (las que lograron permanecer en el mercado luego del impacto que ha provocado la pandemia),por lo que el papel del Ministerio de Economía (Mineco) de ser apoyarles. Es importante señalar que desde ese ministerio se llevan a cabo programas específicos para este segmento empresarial, que deben fortalecerse, opina Pedro Prado, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes).

“El acompañamiento desde el Mineco es muy importante; supongo desde ahí se definirán líneas de acción específicas para atender esta problemática”, dijo.

 

Y para el Director de Economía, de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Francisco Marroquín, Clynton R. López, el incremento de los precios del combustible responde al precio internacional del petróleo, una muestra de la escasez de dicho commodity a nivel internacional, por lo cual considera que sobre ese asunto se puede hacer muy poco.

“Va a afectar a toda la población y cada familia tendrá que tomar decisiones sobre cómo adaptar su presupuesto. Pero realmente, el gobierno no debe brindar apoyos ni subsidios; eso suele tener un efecto negativo a largo plazo porque distorsiona la asignación de recursos”.

Pero indicó que sí se pueden eliminar impuestos específicos al consumo, como los que tiene la gasolina. “Además, deberían dejar al quetzal fluctuar libremente”, enfatizó.