“Las vacunas son la solución para salir rápidamente de esta pandemia”

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El médico Pablo Moreno Franco, jefe del Departamento de Integrado de Cuidados Críticos de Clínica Mayo y autor intermediario del estudio, menciona que uno de los escenarios que se plantean es que si se consigue vacunar a un 30% de la población y luego se paraliza el proceso de inmunización, los contagios aumentarían de nuevo. El modelo se implementó en Minessota, sin embargo, puede aplicarse a otras comunidades.

¿En qué consiste el modelo predictivo de covid-19 que Clínica Mayo desarrolló y cómo puede ayudar a guiar la respuesta hospitalaria en la pandemia?

Los científicos de datos de Clínica Mayo desarrollaron un modelo computarizado de gran precisión para predecir las tendencias de los casos de covid-19 en Estados Unidos. El modelo predictivo ha sido desarrollado para anticipar los casos en las próximas cuatro semanas y cuatro meses. La capacidad de predecir nuevas olas es determinante para prevenir el desborde en los sistemas de salud y para minimizar las muertes. La información se ha utilizado para crear procesos de tamizaje en urgencias y clínicas para enviar a casa a los que se pueden ir con seguridad y así enfocar los recursos hospitalarios y UCI -Unidades de cuidados intensivos- en los más críticos.

¿Los contantes cambios de la pandemia, el comportamiento humano y la aparición de nuevas variantes del SARS-CoV2 pueden influir en las proyecciones que se puedan hacer a través de este modelo?

Sí, efectivamente los cambios en el comportamiento humano y los cambios en el número de casos, las políticas de prevención y los patrones de movilidad han sido incluidos en nuestro modelo.  Ahora también contamos con una investigación nueva que muestra la importancia de una tasa alta de vacunación para reducir la cantidad de casos y controlar la pandemia.

Uno de los escenarios futuros que plantea este modelo es dejar de vacunar a la población, ¿qué pasaría si esto sucede?

En el estudio se detalla la gran importancia de las tendencias de vacunación para el curso futuro de la pandemia y cómo el modelado predictivo de covid-19 de Clínica Mayo puede evaluar las tendencias futuras con base en el ritmo de vacunación.  Por ejemplo, en nuestro estudio del estado de Minnesota, cuando tenía aproximadamente 30% de vacunados con al menos una dosis, si nadie más se vacunara, se anticipaba un pico de 20 casos/100 mil habitantes.

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Tan bien se presenta el que un 75% de la población esté vacunada ¿qué pasaría en este caso? ¿Es ese el ideal de personas que debe estar inmunizada contra el covid-19 en cada país?

En el estudio se estima que, si por ejemplo Minnesota hubiera vacunado al 75% de la población para principios de abril, el promedio de casos en siete días de cada 100 mil residentes, la cantidad de pacientes con covid-19 hospitalizados y en unidades de cuidados intensivos se desplomarían para principios de julio. Según el modelo, este nivel de vacunación suprimiría por completo el crecimiento (incluso ante el aumento reciente de la tasa de contagio) y disminuiría inmediatamente los casos y las hospitalizaciones a niveles muy bajos.

¿Hay algún porcentaje de población que debe estar vacunada para notar un descenso en la hospitalización de casos y de ingresos a las unidades de cuidados intensivos?

El porcentaje que cada comunidad necesita para que las hospitalizaciones y pacientes en cuidados intensivos disminuya incluye la combinación de recuperados y vacunados; también tomando en cuenta las cepas que están circulando en esa comunidad y qué tan transmisibles son. Por ejemplo, varias comunidades que han alcanzado el 50% de vacunación y tenían 20-30% de la población ya recuperada, han visto disminución de casos. Sin embargo, los epidemiólogos anticipan que si hay cepas más transmisibles como la de Inglaterra, esos porcentajes necesarios serían tal vez un poco más altos, por su alta transmisibilidad.

¿Cuál sería el escenario si no se hubiera desarrollado una vacuna contra el covid-19?

Los investigadores de Clínica Mayo estiman que, esta primavera, habría un pico con más de 800 pacientes en las unidades de cuidados intensivos de los hospitales de Minnesota si no se hubiera desarrollado la vacuna. Las proyecciones tienen en cuenta las variantes nuevas del virus SARS-CoV-2, al igual que las medidas de salud pública y los estándares para el uso de mascarillas actuales. Los niveles censales previstos de las unidades de cuidados intensivos serían superiores al doble de la cantidad de pacientes con covid-19 hospitalizados en Minnesota el 1 de diciembre, en el pico de la última ola del año pasado.

¿El incremento de casos que se registra en los países, y de pacientes en cuidados intensivos, se debe a la aparición de nuevas cepas o al cambio de comportamiento de las personas, que pareciera están más relajadas que al principio de la pandemia?

Se puede relacionar la aparición de nuevas variantes porque siempre ocurre cuando los virus se replican. Por ende, las áreas donde se ha visto aparición de nuevas cepas tienden a ser porque la replicación del virus no ha sido apropiadamente controlada con las medidas de control y/o vacunación.

Hay población que duda de la eficacia de las vacunas contra el covid-19 ¿a qué se atribuye esta desconfianza?

Desafortunadamente durante esta pandemia también ha ocurrido una “infodemia”, lo cual es una gran cantidad de desinformación en las redes sociales. Le recomendamos a las personas que eviten las noticias falsas y solamente compartan información proveniente de fuentes con credibilidad y basadas en el método científico. Mucha de la desinformación acerca de las vacunas habla de que el proceso se hizo de forma acelerada. Ciertamente se hizo todo a una gran velocidad, pero afortunadamente se hizo basado en muchísimos años de experiencia con otras vacunas y con rigurosidad científica.

¿Son las vacunas la solución para controlar la pandemia del covid-19 o hay otras maneras de contener al virus? 

Sí, las vacunas son la mejor solución para salir adelante más rápidamente de esta pandemia. El proceso ha sido muy transparente. Nuestra recomendación es clara, la balanza riesgo/beneficio claramente sustenta la vacunación. Documéntense y vacúnense, los efectos secundarios son ínfimos comparados con la enfermedad en sí. Los posibles efectos adversos, incluyendo trombosis, son insignificantes comparados con los que ocurren al padecer covid-19.

¿A qué velocidad, o en que tiempo, debería llegarse a ese 75% de población vacunada para realmente disminuir la mortalidad en los países?

La velocidad con la cual se debe alcanzar una vacunación suficiente para reducir el número de casos va a depender de muchos factores que hay que tomar en cuenta para alcanzar lo que se conoce como inmunidad comunitaria o inmunidad de rebaño.

¿Cuánto tiempo podría durar la inmunidad al covid-19 después de recibir la vacuna?, ¿cambiaría esto con la aparición de nuevas variantes del virus?

La inmunidad que inducen las vacunas tiende a ser más fuerte y duradera que la que producen las infecciones por el nuevo coronavirus (SARS-CoV2). Se espera que la inmunidad inducida por las vacunas dure al menos un año o más, eso dependerá de la velocidad de mutación del virus. Por ejemplo, el doctor Andrew Badley, profesor de medicina molecular de la Clínica Mayo, es más optimista: “Confío en que los efectos de la vacunación y la inmunidad puedan persistir varios años”.

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En Guatemala recién se comenzó con la vacunación contra el covid-19, y el ritmo es lento, ¿cuál sería el riesgo de que este proceso de inmunización se extienda más allá del 2021?

Es importante que el proceso de vacunación ya haya comenzado y anticipamos que cada país tendrá que ir a la velocidad que sus recursos internos se lo permitan. Lo principal en el período inicial es destinar las vacunas a los que más la necesitan, incluyendo aquellos individuos con factores de riesgo por enfermedad severa y los proveedores de primera línea que trabajan con pacientes con covid-19.

En general, las cepas circulantes incluyendo la de Brasil y la del Reino Unido, siguen siendo mayormente susceptibles a las vacunas disponibles. Mientras se alcanzan las metas de vacunación se deben seguir medidas de prevención antes, durante y después de la vacunación, incluyendo las medidas de mascarillas, pantallas faciales y distancia física.