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Los grandes desafíos de la educación en Guatemala
Fundamento para el desarrollo integral, la educación pública y privada debe superar limitantes económicas, estructurales y de calidad, de cara a un mundo competitivo.
La pandemia y el coronavirus ha permitido revalorar la asistencia a las aulas, así como la interacción entre estudiantes y educadores. (Imagen Prensa Libre: Hemeroteca PL)
El sistema educativo nacional tiene ante sí grandes retos que van desde la poca cobertura hasta la falta de una política tecnológica que permita incorporar al país a la tendencia mundial de la conectividad. Analistas consultados consideran que es el momento de repensar la educación y priorizar los problemas, porque no todo se puede corregir al mismo tiempo, pero se debe comenzar ya.
Floridalma Meza, exviceministra Técnica de Educación, afirma que la crisis que desató la pandemia del covid-19 es una gran oportunidad para repensar la educación y acelerar los cambios para encontrar nuevas formas de aprendizaje y soluciones que antes se consideraban imposibles de poner en práctica. “El uso de la tecnología se aceleró y vino para quedarse, pero para lograr estos cambios hay que enfrentar varios desafíos”, sostiene.
La exviceministra asevera que el Sistema Educativo y la escuela ya no pueden seguir siendo los mismos, tomando en cuenta que la pandemia evidenció, aún más, las grandes diferencias que existen entre las áreas urbana y rural, especialmente en las poblaciones más vulnerables. “Los esfuerzos realizados en poco tiempo para impartir educación, en medio de la crisis sanitaria, evidenciaron que los cambios son posibles”,recalcó.
El exministro de Educación Óscar Hugo López no duda de que se debe hacer una reforma sustancial, en la cual deben estar comprometidos no solamente el Ministerio de Educación (Mineduc), sino los políticos, empresarios, padres de familia, sindicalistas, estudiantes y funcionarios, así como demás miembros de la sociedad, porque se necesitan recursos económicos y voluntad política.
El también exministro de Educación Bienvenido Argueta expone que los desafíos deben ordenarse. “Ante los profundos vacíos que tenemos en la Educación, lo primero que debemos hacer es priorizar las dificultades a superar; es un proceso de mediano y largo plazo”, dice.
No ha sido prioridad
El abandono en que se encuentra la educación no es consecuencia de los últimos años —aunque los gobiernos recientes sí pudieron haber llevado a cabo transformaciones esperanzadoras, pero no lo hicieron—, sino que es fruto de la irresponsabilidad histórica de las autoridades y los sectores de poder, a quienes no les ha interesado acrecentar el desarrollo educativo.
Descuido continuado
Argueta opina que una de las principales causas del rezago, por la cual “la educación no despega, es porque no ha sido la prioridad de los gobiernos; nunca han proporcionado los recursos suficientes. Basta señalar que mientras en países como Cuba y Costa Rica la educación de la primera infancia, de 0 a 4 años, es casi universal, en nuestro país sólo llega a cinco por ciento, en una edad que es esencial y fundamental”.
El informe del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) Impulso de la primera infancia refiere que investigaciones recientes muestran que durante los primeros años de vida, y en particular desde el embarazo hasta los tres años, las niñas y niños necesitan una nutrición adecuada, cuidados, estimulación temprana y protección contra todo tipo de violencia, para que se desarrollen adecuadamente y puedan alcanzar todo su potencial.
Argueta asegura que, quienes abordan la Educación como ciencia saben que el principal factor que causa mal rendimiento es la condición socioeconómica de los estudiantes, las experiencias que tienen con su familia y su entorno. Si sobresalen es por su propio esfuerzo, y no porque el sistema les ofrezca oportunidades, indica.
Rezago expulsa a jóvenes
Verónica Spross, del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (Cien), opina que, debido a la pobreza y pobreza extrema en que vive la mayoría de la población, muchos jóvenes se salieron del sistema formal, ya sea porque “tenían que trabajar, no tenían un centro de educación en su comunidad, no tienen para pagar el pasaje a un instituto cercano o porque no les parece interesante estudiar”.
Argueta considera que el hecho de que más del 30 por ciento de la población viva en extrema pobreza contribuye a los bajos índices educativos, especialmente en el nivel secundario. A la baja cobertura del nivel primario “hay que sumar la desatención que existe en los demás ciclos, pues solamente el 60 por ciento de los que terminan la primaria asiste al ciclo básico, y en el nivel diversificado este porcentaje se reduce a un 25 por ciento”, señala.
“Este rezago no se resuelve solo desde Educación, sino también tiene que promoverse una política social, como buena salud, alimentación y protección desde la primera infancia”, comenta Argueta.
Además, “hay que actualizar lo que se está aprendiendo y compatibilizarlo con las necesidades del siglo XXI, porque si se adquieren ciertas competencias los jóvenes van a poder trabajar, incluso a nivel global, pero sí es necesario fortalecer el sistema extraescolar de modo que los que están afuera puedan regresar y retomar sus estudios bajo esquemas flexibles de enseñanza”, complementa Spross.
Meza coincide con la investigadora en cuanto a que el subsistema de educación extraescolar es la gran solución a este grave problema del país, el cual debe atenderse durante varios años, conforme el sistema escolarizado logre la universalización de los diferentes niveles educativos. De ahí la necesidad, señala, de fortalecer este subsistema y trabajar con muchas alianzas estratégicas.
El subsistema de educación extraescolar o paralelo atiende a la población que ha sido excluida o no ha tenido acceso a la educación escolar. Su principal característica es que no está sujeta a un orden rígido de grados, edades ni a un currículum. Las modalidades de enseñanza desescolarizada son: de alternancia, de enseñanza libre y educación a distancia.
Rezago preprimario
Muchas habilidades y competencias estudiantiles se cultivan desde la etapa de preprimaria. Aunque es un requisito oficial, no se exige ninguna constancia para entrar a primaria, explica Diana Brown, de la Asociación de Colegios Privados.
“Es en preprimaria donde se fomenta la colaboración, el trabajo en equipo y el aprendizaje constructivo, que incluye aprender de los errores”.Lamentablemente existe baja cobertura preprimaria, sobre todo en la provincia.
Uno de los mayores cuestionamientos al sistema educativo guatemalteco es si está formando personas para enfrentar la vida laboral. Diana Brown, directora ejecutiva de la Asociación de Colegios Privados (ACP), opina que no está respondiendo lo que se espera, aunque sí existen centros educativos con niveles altos. “Si hacemos una investigación con los que están recién graduados y les preguntamos si la formación que llevaban del colegio o instituto fue suficiente para cumplir con las funciones asignadas, la gran mayoría responderá que no”, dice Brown, quien resalta que se debe tomar en cuenta que las destrezas y competencias exigidas han cambiado. “Lo que están buscando los empleadores en estos tiempos es la capacidad de trabajar e investigar en equipo, tener bastante razonamiento, así como discernimiento crítico y aprendizaje a partir de los errores, una tendencia que viene de mucho antes de la pandemia”, comenta Brown.La directora ejecutiva de la ACP dice que para alcanzar este objetivo es vital la educación preprimaria, de tres a seis años, porque en este nivel se aprenden y afianzan las destrezas básicas, y si un alumno no cursa este nivel le será más difícil tener lo mínimo de dominio. “Lastimosamente, la educación preprimaria, aunque en la legislación es obligatoria para ingresar a primer grado, no se necesita presentar una constancia”.
Quejas universitarias
El bajo rendimiento también se refleja cuando los estudiantes ingresan a las universidades y se les hacen las pruebas de diagnóstico, las cuales, en su mayoría, no aprueban satisfactoriamente.
El exministro López dice que las denuncias de que los estudiantes de nivel medio llegan con una preparación muy débil siempre han existido. “¿Quién es el responsable de formar a los estudiantes de básico y diversificado? ¿Es el Mineduc o las universidades? Son las universidades, pues allí se forman los profesores de Enseñanza Media que luego imparten clases en lo público y privado”, expone.
“Entonces, hay una relación compartida. No solo una entidad es la responsable, y desde el 2014 los profesores de primaria son graduados de las universidades; por lo tanto, ya no pueden seguir diciendo que los estudiantes llegan mal formados porque el Mineduc no los prepara. Aquí hay que ser muy claros en que los problemas son otros y que tenemos que ir atacando, por ejemplo, el nivel de exigencia y la revisión del currículum que se está desarrollando”, asegura el exfuncionario.
Recuperar el interés
En la actualidad, asistir a la escuela o al colegio no despierta interés en muchos menores, lo cual desenlaza en bajo rendimiento, ausentismo o, en el peor de los casos, deserción. Sin embargo, la pandemia también muestra los desafíos de la educación a distancia. En casa incluso se ha revalorado la vivencia del aula. La suspensión actual puede servir para esa reinvención, de cara a los próximos 200 años.
El derecho a la Educación
- En los artículos del 71 al 81 de la Constitución Política de la República de Guatemala se establece el derecho a la educación, sus fines, la libertad que tienen los padres para escoger la educación que recibirán sus hijos, su obligatoriedad en los niveles inicial, preprimaria, primaria y básica; la alfabetización, la promoción de la ciencia y tecnología, entre otros temas relacionados.
- En la Ley Nacional de Educación, decreto legislativo No. 12-91, se desarrollan con mayor profundidad los temas educativos abordados en la Constitución, en cuanto a sus principios y fines. Asimismo, se describe el sistema educativo nacional y su estructura.
- El artículo 5 establece que el sistema educativo nacional se integra por:
- a) el Ministerio de Educación —Mineduc—, b) la comunidad educativa, integrada por educandos, padres de familia, educadores y organizaciones con fines educativos, y c) los centros educativos, que pueden ser públicos, privados o por cooperativa.
- b) En el artículo 6 de la Ley se establece que el sistema educativo se conforma de dos subsistemas: 1. Subsistema de educación escolar 2. Subsistema de educación extraescolar o paralela
- El subsistema de educación escolar está organizado en niveles, ciclos, grados y etapas en educación acelerada para adultos.
- Estos son:
- a) Primer nivel: educación inicial, hasta los 4 años de edad.
- b) Segundo nivel: Educación preprimaria: párvulos 1, 2 y 3; c) Tercer nivel: Educación primaria: grados del 1 al 6, y en educación acelerada para adultos de las etapas 1 a la 4; d) Cuarto nivel: Educación media: ciclo de educación básica y ciclo de educación diversificada.
DESAFÍO 1
Ampliar la cobertura
Aunque durante los últimos años se ha alcanzado una mayor cobertura, especialmente en el nivel primario —casi el 90 por ciento—, el desafío persiste, pues miles de niños y adolescentes continúan fuera de los centros educativos, sin futuro, con la única esperanza de migrar a los centros urbanos e incorporarse a la economía informal o emigrar a los Estados Unidos.
El exministro de Educación Óscar Hugo López resalta que la situación más crítica, en cuanto a cobertura, se refleja en los niveles básico y diversificado, pues el primero solo cubre al 50 por ciento de los adolescentes y en el segundo la situación es más complicada, pues únicamente el 30 por ciento tiene la oportunidad de acceder a este tipo de formación, en el sector público o privado.
“Esta situación arroja una gran cantidad de jóvenes que no terminaron la escuela primaria, básico o diversificado, y se quedan atados a oficios o tareas que no les van a permitir un mejor estilo de vida, ni a la sociedad le aportan un ser humano que tenga habilidades en favor de la comunidad”, añade López.
La falta de oportunidades educativas para estos jóvenes se agrava aún más cuando se revisa que el Mineduc asigna el 99 por ciento de su presupuesto para el subsistema escolarizado, y solamente el 1 por ciento para el subsistema extraescolar, el cual tendría que atender a aproximadamente un millón 800 mil niños y jóvenes que están fuera de la escuela.
“De manera que si adentro de la escuela tenemos 2.4 millones de niños y jóvenes y afuera, 1.8 millones, que algunos proyectan hasta dos millones, estamos bastante mal, lo cual representa un desafío para trabajar con el subsistema extraescolar ofreciendo oportunidades alternativas fuera de lo rígido, que es la escuela, por ejemplo, la educación a distancia a través de los medios virtuales y de forma acelerada”, explica el exministro.
La exviceministra de Educación Floridalma Meza propone restructurar y fortalecer el subsistema de educación extraescolar y alternativa. “A la fecha se cuenta con un Viceministerio de Educación Extraescolar, pero no se ha restructurado la Dirección a nivel central y a nivel departamental”, comenta.
“Es urgente, porque a la fecha se cuenta con más de dos millones de estudiantes en sobreedad y jóvenes fuera del sistema educativo que no son atendidos por ningún otro programa, y la opción más viable es la educación extraescolar”, plantea.
DESAFÍO 2
Mejorar la calidad educativa
Existen discrepancias en cuanto a la forma de medir la calidad de la educación. Algunos consultados parten de los resultados de las evaluaciones Pisa de Matemática y Lenguaje, y otros consideran que también existen otros aspectos fundamentales en la formación como seres humanos; es decir, los valores cívicos y morales, así como la capacidad de reflexionar, cuestionar e investigar la verdad.
El exministro Bienvenido Argueta opina que la calidad educativa también debe estar enfocada en formar sujetos éticos, solidarios, responsables, perseverantes, con empatía, libres y capaces de luchar por lo que es justo y que estén dispuestos a construir un país democrático sobre la base de un sistema legal.
“Se tienen que formar personas que puedan tomar decisiones razonables en un mundo complejo, incierto y cambiante, y que valoren las diferencias étnicas, sociales, de pensamiento y género, dentro de una sociedad extremadamente conservadora que tenemos que transformar”, opina Argueta.
A criterio del exministro, la calidad educativa también debe estar enfocada en proveer a los estudiantes una sólida formación en habilidades de investigación y razonamientos para cuestionar la realidad, no solo aceptar las cosas por fe o ideología, sino agudizar las capacidades de reflexión crítica.
Argueta considera que las pruebas de Matemática y Lectura no son lo único que se debe tomar en cuenta para evaluar a los estudiantes, y que tampoco los docentes salen lo suficientemente capacitados de las universidades para impartir esas clases, pues solo asisten a programas sabatinos. “Ahí tenemos una brecha básica, porque si queremos educar a nuestros hijos tenemos que contar con mejores maestros”, sostiene.
López también cuestiona la atención enfocada en Matemática y Lectura. “No les quito valor, que son fundamentales en el desarrollo del razonamiento y el ordenamiento de las ideas, pero todo ser humano tiene inteligencias múltiples y, como consecuencia, no podemos medir a todos por igual. Un sistema de calidad es el que aprovecha la diversidad de inteligencias”.
Considera que, antes, tenemos que definir qué vamos a entender por calidad educativa, porque algunos piensan que esos dos cursos son todo. “¿Qué hay de los valores, la ciudadanía y la ética? En un sistema permanente en el que sus líderes están vinculados a actuaciones antiéticas y de corrupción no pueden dejarse de lado la ética, los principios, los valores, la ciudadanía y la democracia, pues son elementos claves de un sistema de calidad”, indica.
DESAFÍO 3
Valorar e impulsar la educación bilingüe
Uno de los grandes retos es valorizar la educación bilingüe intercultural basada en las raíces y pertinencia bilingüe cultural y social de la población durante los primeros tres años de educación primaria para que luego de esta formación en su idioma y contexto, puedan asimilar otros idiomas, como el español y el inglés.
Según López, aún existen posturas extremas, erradas, que plantean que no debe haber educación bilingüe en idiomas mayas, sino que debe ser en español e inglés, por ejemplo. “Esa es una corriente, sin embargo, muchos países han logrado avanzar en la pertinencia cultural y lingüística de acuerdo a las raíces y la cultura de los pueblos”.
Guatemala no puede vedar a los niños que aprendan en su idioma y con ello comprender en su idioma los procesos formativos, dice López. “Es contradictorio que hablen un idioma maya y vayan a la escuela y los primeros años escuchen a una persona que enseña en español, como consecuencia fracasan en primero y segundo año y ya no regresan a la escuela”.
López dice que se debe fortalecer la educación bilingüe intercultural, de manera que los idiomas mayas y el castellano sean aspectos básicos que se trabajen en las escuelas. Los niños no pueden y no deben recibir educación en un idioma que no sea el materno.
La Dirección General de Educación Bilingüe Intercultural define esta formación como el desarrollo y modalidad educativa planificado y elaborado en dos idiomas: la lengua Materna o primer idioma (L1) y el español (L2); que promueve la convivencia entre personas de diferentes culturas, dirigido a los pueblos Maya, Garífuna, Xinka y Ladino.
La Educación Bilingüe Intercultural (EBI), según dicha Dirección, es el eje en el cual se construye la identidad y proporciona las herramientas necesarias para que los cuatro pueblos que cohabitan en Guatemala amplíen sus oportunidades de crecimiento local, regional y nacional, logrando el pleno desarrollo de su potencial.
La meta número uno de esta Dirección del Mineduc es la ampliación de cobertura de atención de los niños y niñas indígenas en edad escolar de las comunidades mayas, que tienen mayor número de hablantes, k’iche’, kaqchikel, mam y q’eqchi’ de preprimaria a 6º grado de primaria.
Y la meta número dos es la ampliación de la cobertura de atención de los niños y niñas indígenas en edad escolar de preprimaria a tercer grado en las comunidades: q’anjob’al, ixil, tz’utujil, poqomchi’, achi’, akateko, awakateko, chuj, popti’, mopan, xinka y garífuna.
DESAFÍO 4
Infraestructura, mobiliario escolar, refacción y textos
La escasez de edificios escolares, especialmente en la provincia, y el mal estado en que se encuentra la mayoría de los construidos, es otro de los desafíos de la educación guatemalteca. Este problema se evidencia aún más en la época de lluvia, cuando las construcciones se inundan y se suspenden las clases.
Según Verónica Spross, del Cien, en estos momentos de pandemia el gran desafío es preparar los centros educativos para el regreso a clases. Sin embargo, se debe aprovechar la pausa para diseñar una estrategia para dotar de servicios a la mayoría de edificios, pues según un análisis del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), del 2018, “había por lo menos 10 mil establecimientos que tenían deficiencias de infraestructura, entre ellos falta de agua potable”.
El Mineduc ha comenzado programas de remozamiento de infraestructura, pero no abarca a la totalidad de edificios. La magnitud del problema es enorme, por lo que se debe plantear un esfuerzo en el que participen las municipalidades, los consejos de desarrollo (cocodes) y las organizaciones de padres de familia, dice.
En relación con las críticas que recibe el Mineduc por el mal estado de la infraestructura, el exministro López dice que es importante que la población sepa que esta cartera no es la responsable de la construcción de edificios, pues eso corresponde al Ministerio de Comunicaciones (CIV). “Lo que ha hecho el Mineduc es efectuar algunas salidas momentáneas en la reparación de escuelas, porque no tiene la experiencia ni los recursos”, explica.
Otro reto es la entrega de textos escolares. “Lo que se hacía —antes— era que se pagaba a un especialista para que redactara, editara y diseñara los textos, y eso no es lo correcto. Se formó un equipo con los profesores más preparados y se les asesora con personas especializadas en diseño, con lo cual se ha logrado tener un nivel de mayor aplicabilidad de los textos”, asegura López.
El exministro señala que en este aspecto se debe desarrollar una política moderna de edición, de manera que los niños tengan materiales actualizados. Finalmente, opina que la refacción escolar debe ser una garantía sostenida, pues a veces es el único alimento completo que los estudiantes reciben al día.
DESAFÍO 5
Mejorar currículo
El Currículo Nacional Base (CNB) del nivel primario se comenzó a diseñar en el 2000 y desde entonces se le han hecho cambios que buscan mejorar la educación; sin embargo, el gran reto está en los ciclos básico y diversificado, pues en estos no se ha concretado ningún proyecto y se mantienen a la deriva.
López opina que el CNB de educación primaria “es bueno” y que hasta hora esta política educativa se ha mantenido, respetado y se ha ido mejorando, pero hasta hace unos tres años se comenzó a evaluar y se empezaron a efectuar algunos acomodos.
Sin embargo, agrega López, en el currículo de básico y diversificado la “situación es lamentable”, porque, por ejemplo, el primero tiene hasta 15 asignaturas, mientras que la tendencia latinoamericana, en promedio, es de ocho. “Más materias en el currículo no significa una mejor educación, porque se imparten períodos de apenas 25 minutos”, advierte.
A raíz de esta situación se está trabajando para reducir la cantidad de materias a nueve, pero allí se desata la polémica porque algunos reclaman, según López, que por qué se van a quitar determinadas clases, otros creen que a la medida que se enseña más se tendrá mejor calidad o formación.
El reto, entonces, es diseñar un currículo para básico y diversificado más pertinente y congruente, que tenga un continuo y adecuado mejoramiento y que, además, responda a las expectativas de la sociedad, opina. “En resumen, en primaria y párvulos ha habido un mejor desarrollo del currículo, pero en básico y diversificado queda mucho por trabajar”, dice López.
Meza opina que se debe promover una reforma que garantice una formación integral y el desarrollo de competencias claves ante los cambios sociales, ambientales y tecnológicos, y que sea compatible con el aprendizaje a distancia, de acuerdo con las necesidades reales de aprendizaje y los diferentes contextos culturales. Que permita la prevalencia del aprendizaje de competencias y desarrollo de habilidades para la vida y el desarrollo integral.
“Que permita educar para la incertidumbre. Que tome muy en cuenta a la población de estudiantes más vulnerables y responda a sus necesidades con calidad, equidad y pertinencia; en especial en todo lo que se refiere a la educación bilingüe intercultural”, afirma la exviceministra y también asesora de esa cartera.
DESAFÍO 6
Formación y actualización docente
La formación y actualización de los docentes en todos los niveles es un reto impostergable. Un paso clave fue la formación de maestros con un título universitario y la profesionalización de los que están en ejercicio del cargo por medio del programa de actualización docente que efectúan las universidades. En ambos se requiere evaluar para plantear mejoras.
La exviceministra Meza dice que la formación y actualización docente debe adentrarse en el uso de la tecnología, como herramientas de aprendizaje, procesos de enseñanza semipresenciales, a distancia, virtuales y flexibles. Que cuenten con las capacidades y los recursos profesionales para aprender e integrar los dispositivos digitales en la enseñanza.
“Esto conlleva cambios curriculares en la carrera de Formación Inicial Docente, formación profesional y procesos de actualización acordes a los nuevos paradigmas educativos. Es importante también el aprendizaje de nuevas metodologías y procesos de evaluación, y que se fortalezca la articulación y la flexibilidad entre niveles y tipos de educación y formación”, explica la exviceministra.
López resalta que los docentes egresados de la universidad entraron a la formación universitaria que se diseñó en el 2013 y se implementó en el 2014, pero que ya necesita una evaluación correctiva.
El exministro considera que también se debe hacer una revisión de la calidad de los mentores que están en servicio público, que son unos 140 mil, y que desde hace más de una década se están profesionalizando y actualizando en la universidad para mejorar su desempeño. “Se han graduado más de 25 mil con carreras intermedias y ya se graduó el primer grupo de seis mil a nivel de licenciatura para preprimaria y primaria”.
El exfuncionario considera que a este grupo también hay que evaluarlo, para determinar qué mejoras se pueden hacer.
“Como país tenemos la costumbre inadecuada de implementar acciones y no evaluarlas ni revisarlas para determinar cómo están. Después venimos y las quitamos, pero nunca hacemos un proceso de evaluación”, señala.
Argueta afirma que la decisión de elevar la carrera del Magisterio a nivel universitario fue una medida acertada, pero es necesario mejorar el nivel de las universidades y, a la vez, pensar en fundar escuelas normales a nivel superior. “Hay personas que quieren que la formación docente regrese a nivel secundario, lo cual sería una locura y una aberración”, enfatiza.
DESAFÍO 7
Revolución tecnológica
La experiencia que dejó la pandemia del covid-19 ha puesto de manifiesto la importancia del uso de la tecnología y la conectividad a internet para cumplir con el desarrollo de los contenidos, pero a la vez ha puesto de manifiesto la enorme brecha digital que persiste en Guatemala.
Meza afirma que para concretar esta meta se requiere que los docentes y estudiantes tengan conectividad a escala nacional.
Asimismo, se deben mejorar las plataformas de aprendizaje y el uso de todas las herramientas tecnológicas, con metodología que permita compatibilizar la enseñanza telemática con la presencial, para lo cual se puede contar con la cooperación nacional e internacional.
Para Argueta, la actual crisis muestra que muy pocos guatemaltecos cuentan con tecnología, especialmente en el área rural, lo cual se convierte en un gran desafío. El último censo, del 2018, evidenció que aproximadamente el 7 por ciento de la población del área rural tiene acceso a internet, mientras que en las áreas urbanas solo el 37 por ciento.
López afirma que el desafío de la tecnología no solo corresponde al Mineduc, sino al Estado de Guatemala, y como consecuencia debe ser una prioridad nacional. “No basta con comprar cien mil, 200 o 500 mil computadoras o tablets, tiene que ser una dotación total a los niños, y estamos hablando de unos 2.4 millones de estudiantes que deben tener un equipo personal y conectividad gratuita o a muy bajo costo”, indica.
A criterio de López, para lograr estas metas la banda 4G debió haberse condicionado en el momento de la licitación, “para que, a quien se le otorgara, provea de internet a todas las escuelas y bibliotecas del país que no tuviesen acceso y así lograr conectividad, como sucede con muchos países de Europa, porque el internet se ha convertido en una necesidad urgente”.
Spross comenta que la conectividad se ha vuelto fundamental para trabajar, estudiar o comunicarnos, debido a los cambios que trajo la pandemia. Sin embargo, no todos los guatemaltecos tienen acceso a internet, solamente cuatro de cada diez cuentan con acceso a conectividad. “El covid-19 dejará entre sus consecuencias económicas y sociales una ampliación en la brecha digital”, advierte.
Agrega que el sueño es que todos los educandos tengan una laptop o una tablet, y también los maestros, lo cual se volvió indispensable a partir del 2020.