Elecciones Generales Guatemala 2023

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Financiamiento público que recibirán los partidos políticos se eleva a un monto total de Q71.9 millones

El cálculo con los resultados preliminares de las elecciones 2023 muestra que el financiamiento público que recibirán los partidos políticos se eleva a un monto total de Q71 millones 912 mil.

Por los siguientes cuatro años, el Estado deberá pagar a los 16 partidos políticos que continuarán vigentes en cuatro cuotas anuales iguales. (Foto: Hemeroteca Prensa Libre)

Por los siguientes cuatro años, el Estado deberá pagar a los 16 partidos políticos que continuarán vigentes en cuatro cuotas anuales iguales. (Foto: Hemeroteca Prensa Libre)

Las agrupaciones que hayan acaparado el cinco por ciento de los votos o logrado un escaño en el Congreso pueden recibir este financiamiento. La Ley Electoral y de Partidos Políticos (Lepp) establece que el Estado contribuirá con US$2 por cada voto válido que los partidos reciban.

El cálculo se realiza tomando la mayor cantidad de votos de la papeleta de binomio presidencial o Lista Nacional de diputados por cada partido.

En esa línea, la agrupación que más dinero recibirá es la Unión de la Esperanza Nacional (UNE) con una cantidad aproximada de Q13 millones. A Movimiento Semilla le corresponden Q10 millones y a Vamos por una Guatemala Diferente Q9 millones.

Por los siguientes cuatro años, el Estado deberá pagar a los 16 partidos políticos que continuarán vigentes en cuatro cuotas anuales iguales. El año de elecciones, las organizaciones pueden destinar el monto completo del año a los gastos de la campaña y deberá ser otorgado en enero, según la ley.

En cuanto a las coaliciones, el monto se divide entre cada agrupación según como lo decidan en acuerdo los partidos involucrados.

Disminución

La cifra de deuda política es menor a la del proceso electoral de 2019, que correspondía a Q79.1 millones. En comparativa, en esa oportunidad se tuvieron 208 mil 726 votos nulos, mientras en esta ocasión fueron 966 mil 389.

El aumento significativo del voto nulo, para Virginia Pinto de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes), podría considerarse como un castigo político y financiero.

“Puede verse como cierta manera no solo como un castigo de llegar de favorecer con el voto para que se lleguen a las curules o a los puestos de decisión popular, sino que también castigo de forma monetaria”, señaló.

Esto debido a la concientización que se ha dado sobre que los votos de la ciudadanía también se traducen en dinero para las organizaciones políticas.

“Las personas que motivaban el voto nulo era, una parte eso, hacer ver que en realidad el voto no es únicamente ir a elegir a alguien, sino que también mi voto se traduce en dinero para los partidos políticos”, destacó Pinto.

Destino de los fondos

De acuerdo con el artículo 21 Bis de la Lepp, los fondos deben destinarse un 30 por ciento para la capacitación y formación de afiliados; 20 por ciento para el funcionamiento de la sede nacional y el 50 por ciento para funcionamiento de las sedes departamentales y municipales.

Sin embargo, en la práctica sucede diferente, tal como afirmó Roberto Alejos, expresidente de Congreso y militante por varios años en la política partidista. “Lo que yo he podido ver es que primero se va en sueldos y salarios que se ponen para el personal de los partidos que ni siquiera funciona”, explicó.

A lo que añadió que muchas agrupaciones que pertenecen a grupos ideológicos internacionales utilizan los fondos para viajes, justificando que se recibirán capacitaciones. “Muchos partidos usan a plata para irse de viaje con el pretexto que es para formación y capacitación, como los que pertenecen a las internacionales, aseguró Alejos.

Pinto comentó que la ciudadanía reclama a los partidos que fuera de época electoral hay pocos o ningún acercamiento con los partidos porque pareciera que no hay presencia partidaria en el territorio guatemalteco.

“Esa presencia no se ha visto luego de las elecciones y esto por ejemplo podría servir para de cierta manera para mantener ese reclamo que ha tenido la población del alejamiento de los diputados cuando ya han sido electos”, aportó la analista.

Y recalcó que esto corresponde a los derechos y obligaciones de los partidos políticos.

Además, Alejos recomendó que se mejoren los mecanismos de fiscalización porque actualmente el Tribunal Supremo Electoral (TSE) no posee la capacidad para mantener el control sobre el financiamiento público.

“El Tribunal no tiene la capacidad de en época no electoral de ir a fiscalizar realmente, ni la intención tampoco de hacerlo”, declaró.

Fondos se trasladaron con atraso

Durante las reuniones de fiscales con el TSE, Adolfo García, fiscal del partido Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG-Maíz), reclamó en reiteradas ocasiones al pleno que el monto correspondiente a la cuota anual de este año no había sido trasladada, a pesar que se había realizado la solicitud.

La respuesta que obtenía por parte de los magistrados era que los fondos habían sido enviados a las demás agrupaciones según el orden de las solicitudes y que no se podían realizar modificaciones presupuestarias en ese momento por falta de presupuesto.

Debido a que en algunos listados, URNG-Maíz participaba en coalición con Winaq el fiscal, Kanek Zapil, confirmó que para la campaña fueron los fondos de la agrupación los que fueron usado en conjunto.  Además, que fue hasta el sábado 24 que fue notificado URNG-Maíz del traslado de fondos, cuando la campaña electoral ya había finalizado.

De acuerdo con los cálculos de deuda política del 2019, a URNG-Maíz le correspondían cerca de Q365 mil, que este año se destinarían a la campaña electoral.

A decir de Alejos, este atraso pudo ser de manera intencional para obstaculizar el llamado al voto por parte de la agrupación. “El partido URNG-Maíz no les parece, debería de desaparecer, le depositamos de último”, comentó.

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