7 de agosto de 1987: los presidentes de los países de Centroamérica sientan las primeras bases para la búsqueda de una solución negociada del conflicto con la firma del Acuerdo Esquipulas II en la ciudad de Guatemala.
Octubre de 1987: la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca (URNG) acepta el diálogo propuesto por el presidente Vinicio Cerezo (1986-1991) durante una gira por Europa y declara un cese unilateral del fuego para favorecer las conversaciones. Representantes de las partes se reúnen en Madrid, España.
Agosto de 1988: la Comandancia de la URNG se reúne en San José de Costa Rica con la Comisión Nacional de Reconciliación (CRN) que preside el obispo Rodolfo Quezada Toruño, con el objetivo de reabrir el diálogo.
30 de marzo de 1990: delegados de la CNR y la URNG firman en Oslo, Noruega, un Acuerdo Básico para la búsqueda de la Paz por medios políticos. Se nombra a Quezada Toruño como conciliador.
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Mayo de 1990: la URNG se reúne con los representantes de los partidos políticos en Madrid, para promover una reforma constitucional.
1 de junio de 1990: la URNG se reúne con representantes de la instancia política, la CNR y observadores de la Organización de Naciones Unidas (ONU). Se suscribe el Acuerdo de San Lorenzo El Escorial sobre actos preparatorios de naturaleza jurídica.
1 de septiembre de 1990: en Ottawa, Canadá, se reúne la comandancia de la URNG con el Cacif, la CNR y observadores de la ONU.
26 de septiembre de 1990: en reunión con los líderes de la URNG en Quito, Ecuador, representantes de las iglesias expresan su apoyo a la paz.
26 de abril de 1991: inicia la negociación directa y se aprueba el Acuerdo de México, que contiene las normas de procedimiento y temario.
25 de julio de 1991: se suscribe en Querétaro, México, el Acuerdo sobre la Democracia en Guatemala” y comienza la discusión sobre derechos humanos.
Mayo de 1993: discrepancias en torno los derechos humanos y la instalación de una Comisión de la Verdad llevan al estancamiento de las negociaciones, cuando el gobierno condiciona la firma de los acuerdos a un cese el fuego. El rompimiento del orden constitucional del 25 de mayo, causado por el entonces presidente Jorge Serrano Elías, determina la suspensión de los diálogos de paz.
Octubre de 1993: el nuevo presidente Ramiro de León Carpio expone ante la ONU su Plan de Paz, a partir del Acuerdo de Esquipulas II. La URNG rechaza que se desconozcan los acuerdos de Oslo y México.
10 de enero de 1994: se suscribe el Acuerdo Marco para la Reanudación del Proceso de Negociación ente el Gobierno de Guatemala y la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca en México, D. F. También se crea la Asamblea de la Sociedad Civil con Quezada Toruño como presidente.
29 de marzo de 1994: se suscribe el Acuerdo de Calendarización las Negociaciones para una Paz Firme y Duradera, que establece el compromiso de llegar a la paz en 1994.
17 de junio de 1994: se firma el Acuerdo para el Reasentamiento de las Poblaciones Desplazadas por el enfrentamiento armado en Oslo.
23 de junio de 1994: al cabo de largas negociaciones se suscribe el acuerdo para la creación de la Comisión para el Esclarecimiento Histórico de Violaciones a los Derechos Humanos y hechos de violencia durante el conflicto armado interno.
31 de marzo de 1995: se firma en México el Acuerdo de Identidad y Derechos de los Pueblos Indígenas.
6 de mayo de 1996: se firma el Acuerdo sobre Aspectos Económicos y Situación Agraria.
19 de septiembre de 1996: se firma el Acuerdo sobre Fortalecimiento del Poder Civil y Función del Ejército en una Sociedad Democrática, último “tema sustantivo” de la agenda fijada.
4 de diciembre de 1996: se firma el Acuerdo Definitivo de Cese el Fuego.
7 de diciembre de 1996: se suscribe el Acuerdo sobre Reformas Constitucionales y Régimen Electoral. El 12 se acuerda la incorporación de la URNG como partido político.
El 29 de diciembre de 1996: se suscribe el Acuerdo de Paz Firme y Duradera, y el cronograma de implementación de los acuerdos anteriores.
Con información documentada por la Secretaría de la Paz.
HORROR AL DESCUBIERTO
La búsqueda de víctimas del conflicto armado condujo al hallazgo de fosas comunes y cementerios clandestinos con restos de pobladores asesinados en ataques perpetrados por integrantes del Ejército o de la guerrilla, en diversas localidades del país. Los informes de memoria histórica denunciaron las masacres cometidas.
masacres cometidas.
Foto Prensa Libre
