Salazar no murió de inmediato. Debido a que los bomberos no se presentaron a tiempo, aun con vida tuvo que ser lllevado por una autopatrulla de la Policía Nacional Civil (PNC) al Hospital Nacional de Mazatenango pero murió en el camino.
La unidad era resguardada por un guardia de seguridad privada, Dalvi Benedicto Víctor Raymundo Vásquez, 37, quien resultó herido, por lo que fue ingresado al hospital de Mazatenango. El ayudante, Edilson Altobelly Palacios, 23, resultó con golpes y quedó hospitalizado en el nosocomio de Tiquisate.
En el autobús viajaban unas 26 personas, de las que varias sufrieron crisis nerviosa.
Autoridades investigan si el crimen fue a causa de negar a pagar extorsión.
