Por esa época era conocido como Cine Teatro Avenida. En 1986 pasó a ser parte del Ministerio de Cultura y desde entonces se le llama oficialmente Teatro de Bellas Artes.
Aunque hoy día está destinado para expresiones artístico culturales en general, y específicamente para el uso de los escolares, los directores teatrales Ana María Bravo y Jorge Henández Vielman coinciden en señalar que el lugar donde se ubica es muy temido por la abundancia de ladrones y drogadictos. El director teatral Víctor Barillas, por su parte, afirma que lo ha utilizado un par de veces sin ninguna complicación.
Otro problema que enfrenta este teatro es que no tiene parqueo y en las inmediaciones no existe un área para este propósito. Además, cuando se realizan actividades nocturnas, quienes viajan en camioneta no encuentran transporte urbano porque deja de circular temprano por ese sector.
Actualmente la sala es alquilada para graduaciones, seminarios y elecciones de reina, por Q1500, y los fondos son utilizados, según su director, Haroldo Vallejo, para trabajos de remozamiento y mejoras en diferentes áreas del teatro. Además, el Ministerio de Cultura le tiene asignado un presupuesto anual de Q829, 612.82.
Excepto por una que otra compañía de teatro para escolares, esta sala es prácticamente inútil para las compañías teatrales de Guatemala.
Según su director, hoy cuenta con un nuevo equipo de sonido e iluminación, y además se cambió la tapicería de las 750 butacas.
Ahora sólo hace falta que las compañías teatrales se animen a echar andar a este viejo teatro.