El Cúmulo del Árbol de Navidad, como fue bautizado popularmente el conjunto de estrellas que forman NGC 2264, está compuesto por cerca de cuarenta estrellas jóvenes y gases, y sus colores forman un árbol cósmico de luces y colores muy brillantes.
La imagen, captada por el observatorio de rayos X Chandra de la Nasa, fue distribuida a través de las redes sociales por la administración aeronáutica estadounidense y en pocas horas se ha viralizado hasta alcanzar hoy casi dos millones de reenvíos o 7,5 de me gusta en la red social X (antes twitter).
Las estrellas que forman este árbol de Navidad son todas jóvenes, con edades comprendidas entre 1 y 5 millones de años y están localizadas en la constelación de Monoceros, en la Vía Láctea, a unos 2.500 años luz de la Tierra, según los datos de la Nasa, que ha precisado que tienen tamaños muy variados.
Algunas de las estrellas del árbol tienen apenas una décima parte del Sol, pero otras suman una masa que multiplica por siete la del Sol.
La nueva imagen que ha difundido la Nasa en una versión animada de esta curiosidad realza aún más el parecido de este cúmulo con un popular árbol navideño, con luces azules y blancas que parpadean y que emiten los rayos x que han podido ser captados por el citado Observatorio.
Esas luces se completan con otros datos ópticos que muestran el gas del cúmulo formando una gran nebulosa verde, que la Nasa ha comparado con las agujas de un pino, mientras que los datos infrarrojos muestran varias estrellas en un primer plazo y un fondo en blanco.
Las estrellas jóvenes como las que forman este árbol son volátiles y sufren fuertes llamaradas en rayos X y otros tipos de variaciones que se observan con distintos tipos de luz, pero la Nasa ha advertido de que las variaciones coordinadas y parpadeantes que se han mostrado en la animación son artificiales y que se ha hecho así para enfatizar las similitudes con un árbol de Navidad.
Los parpadeos de esas luces no están en realidad sincronizadas, ha explicado la Nasa, que ha precisado que esas luces están relacionadas con los campos magnéticos e incluyen llamaradas como las que experimenta el Sol, aunque mucho menos potentes, además de puntos calientes y regiones oscuras en las superficies de las estrellas que entran y salen de la vista a medida que las estrellas van girando.
La imagen que la Nasa ha logrado viralizar se ha realzado mediante la rotación de la imagen y la elección de los colores, para situar en la cúspide la forma cónica del árbol.