Escenario

El ser humano desde distintos ángulos

Para cerrar el año, la Galería Ana Lucía Gómez reunió obras de tres grandes artistas de trayectoria internacional: los mexicanos Javier Marín y Roberto Cortázar, y el guatemalteco Carlos Mérida.

Arriba: mural de Carlos Mérida, sin título, técnica mixta. Mide 230 por 276 cm. (Foto Prensa Libre: Lucía Herrera)

Arriba: mural de Carlos Mérida, sin título, técnica mixta. Mide 230 por 276 cm. (Foto Prensa Libre: Lucía Herrera)

“Desde hace tiempo tenía el sueño de juntar piezas de estos tres grandes artistas. Marín expuso recientemente en Luxemburgo, y esta semana abre en Roma. Su obra es impresionante. Probablemente es el próximo Botero a escala Latinoamericana”, comentó Ana Lucía Gómez, directora de la galería.

“Cortázar fue el consentido de José Luis Cuevas (1934) —pintor, dibujante, escritor, grabador, escultor e ilustrador, uno de los principales muralistas mexicanos—. “Tiene una forma muy particular de interpretar el cuerpo humano. De él tenemos un cuadro interesante con un rostro; y de Mérida, hay un mural espectacular que pesa más de dos toneladas”, agrega la directora.

Los artistas

La obra de Marín gira en torno al ser humano integral. Muestra seres vivos, palpitantes con cuerpos que se presentan vulnerables y descompuestos, pero a la vez dignos y orgullosos. Él trabajó recientemente para la catedral de Zacatecas, México.

Cortázar es un artista que toma al cuerpo humano como referente, concepto y tema. En cada una de sus obras, el movimiento, la luminosidad y el gesto son atrapados en la forma y el volumen. Y Carlos Mérida es un artista que dejó huella en Guatemala y México, donde residió por muchos años. En su colorido trabajo siempre aborda temas nacionales.

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