Escenario

El escudo de Guatemala, símbolo patrio, y el poema de Asturias inspirado en la nación

El escudo de Guatemala está cargado de simbolismo que refleja valores positivos para los guatemaltecos.

Historia de la bandera de Guatemala

El Escudo de Guatemala tiene dos rifles, ramas de laurel, un pergamino, así como una imagen de el quetzal. (Ilustración Prensa LIbre: Hemeroteca)

El Congreso de la República de Guatemala describe que la versión actual del Escudo de Guatemala data de 1871, creado durante el gobierno de Miguel García Granados y diseñada por el ciudadano suizo Juan Bautista Brener.

Entre los elementos del escudo están los rifles, que aluden a la fuerza, mientras que las espadas a la justicia y soberanía.

Las ramas de laurel representan la victoria, el pergamino recuerda la fecha de la Independencia y el Quetzal simboliza la libertad.

En 1968, el presidente Julio César Méndez Montenegro estableció algunos cambios al escudo según acuerdo gubernativo del 12 de septiembre de 1968.

Guatemala bajo los ojos de Miguel Ángel Asturias

El talento de Miguel Ángel Asturias le llevó a explorar diferentes géneros con poesía, dramaturgia, cuentos y ensayos.

Al hablar de Asturias, Denise Phé-Funchal, escritora guatemalteca y docente de la carrera de Comunicación Estratégica de la Universidad del Valle de Guatemala expresa que es un autor vigente en el sentido de los temas que aborda a lo largo de su obra y siguen siendo parte de la realidad guatemalteca.

En su poema A Guatemala evoca mensajes como en el siguiente verso en que habla del punto central del Escudo de Guatemala: el quetzal.
"¡Patria de las perfectas aves, libre
vive el quetzal y encarcelado muere,
la vida es libertad, Patria, lo sabes!"


En el poema, Asturias destaca que no puede vivir en cautiverio, lo que refuerza el significado del ave en el escudo como un emblema de la libertad y la independencia.

Aunque el poema no menciona directamente las armas que aparecen en el escudo, sí menciona la lucha y la resistencia del pueblo.

A Guatemala

Por Miguel Ángel Asturias

¡Patria de las perfectas luces, tuya
la ingenua, agraria y melodiosa fiesta,
campos que cubren hoy brazos de cruces!

¡Patria de los perfectos lagos, altos
espejos que tu mano acerca al cielo
para que vea Dios tantos estragos!

¡Patria de los perfectos montes, cauda
de verdes curvas imantando auroras,
hoy por cárcel te dan tus horizontes!

¡Patria de los perfectos días, horas
de pájaros, de flores, de silencio
que ahora, ¡oh dolor!, son agonías!

¡Patria de los perfectos cielos, dueña
de tardes de oro y noches de luceros,
alba y poniente que hoy visten tus duelos!

¡Patria de los perfectos valles, tienden
de volcán a volcán verdes hamacas
que escuchan hoy llorar casas y calles!

¡Patria de los perfectos frutos, pulpa
de paraíso en cáscara de luces,
agridulces ahora por tus lutos!

¡Patria del armadillo y la luciérnaga
del pavoazul y el pájaro esmeralda,
por la que llora sin cesar el grillo!

¡Patria del monaguillo de los monos,
el atel colilargo, los venados,
los tapires, el pájaro amarillo

y los cenzontles reales, fuego en plumas
del colibrí ligero, juego en voces
de la protesta de tus animales!

Loros de verde que a tu oído gritan
no ser del oro verde que ambicionan
los que la libertad, Patria, te quitan.

Guacamayas que son tu plusvalía
por el plumaje de oro, cielo y sangre,
proclamándote va su gritería...

¡Patria de las perfectas aves, libre
vive el quetzal y encarcelado muere,
la vida es libertad, Patria, lo sabes!

¡Patria de los perfectos mares, tuyos
de tu profundidad y ricas costas,
más salóbregos hoy por tus pesares!

¡Patria de las perfectas mieses, antes
que tuyas, júbilo del pueblo, gente
con la que ahora en el pesar te creces!

¡Patria de los perfectos goces, hechos
de sonido, color, sabor, aroma,
que ahora para quién no son atroces!

¡Patria de las perfectas mieles, llanto
salado hoy, llanto en copa de amargura,
no la apartes de mí, no me consueles!

¡Patria de las perfectas siembras, calzan
con hambre de maíz sus pies desnudos,
los que huyen hoy, tus machos y tus hembras!

ESCRITO POR:

Ingrid Reyes

Periodista de Prensa Libre especializada en periodismo de bienestar y cultura, con 18 años de experiencia. Premio Periodista Cultural 2023 por el Seminario de Cultura Mexicana y premio ESET región centroamericana al Periodismo en Seguridad Informática 2021.