Weinstein fue acusado de violación y crimen sexual en Nueva York el viernes pasado, ocho meses después del estallido del escándalo en octubre de 2017, en un hito para el movimiento #MeToo contra el acoso y la agresión sexual.
“Esta acusación coloca al acusado un paso más cerca de asumir la responsabilidad por los crímenes de violencia de los cuales está ahora inculpado”, dijo el fiscal de Manhattan, Cyrus Vance, en un comunicado.
“Nuestra fiscalía juzgará este caso no en los medios, sino en la corte, donde pertenece”, añadió el fiscal, criticado porque hace tres años no quiso presentar cargos contra Weinstein por otra denuncia de agresión sexual.
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“Esta investigación permanece activa. Seguimos urgiendo a más sobrevivientes y a otros con informaciones relevantes que nos llamen”, pidió.
“No culpable”
Weinstein piensa declararse no culpable y “niega fuertemente” las “acusaciones sin fundamento” en su contra, dijo el miércoles su abogado Ben Brafman.
“Avanzaremos pronto para desestimar formalmente la inculpación y si este caso termina en un juicio, esperamos que Weinstein sea absuelto”, añadió.
Si es juzgado y declarado culpable de todos los cargos, podría ser sentenciado a entre cinco y 25 años de cárcel.
Por consejo de sus abogados, que creen que el fiscal de Manhattan está cediendo a “la presión política”, Weinstein declinó testificar ante el gran jurado.
