Allen, de 86 años, conversó con Baldwin durante más de media hora en una transmisión en vivo en la cuenta de Instagram del actor.
“Probablemente haré esta película más, pero he perdido gran parte de la emoción, porque no tiene el mismo efecto cinematográfico, no es como cuando comencé a filmar”, dijo el director de Manhattan, Annie Hall y A Roma con amor.
Allen dijo que reflexionó sobre el tema tras agarrarle el gusto al aislamiento durante la pandemia. “Estaba en casa escribiendo mucho”, dijo. “Es una forma agradable de vivir. Luego pensé: ‘bueno, capaz que hago una o dos [películas más]'”.
“No me divierto igual haciendo una película y presentándola en el cine (…) Era agradable saber que 500 personas la veían de una vez”, comentó sobre los cambios en la industria, sacudida por la llegada y el crecimiento de las plataformas de streaming.
“Voy a hacer una más y ver cómo me siento”, agregó.
Baldwin, quien ha estado en el ojo del huracán luego del disparo que mató en octubre a su directora de fotografía Halyna Hutchins en un set de rodaje, sorprendió el domingo 26 de junio anunciando que conversaría con el director acerca de su más reciente libro humorístico, Zero Gravity.
La conversación, que tuvo varios problemas técnicos y captó una audiencia de unas 2.700 personas, se centró en el libro de Allen, evitando preguntas sobre las acusaciones de abuso sexual de su hija adoptiva Dylan Farrow, que empañaron la carrera del director ganador del Óscar.
El caso es abordado en el documental Allen v. Farrow, lanzado por HBO en febrero de 2021.
En el primero de los cuatro episodios de la producción, Dylan Farrow, adoptada por Allen y su exesposa Mia Farrow, reitera su acusación contra su padre de haber abusado sexualmente de ella cuando tenía siete años, en 1992.
Allen ha negado las acusaciones, por las que ha enfrentado varias investigaciones.