Los que se atreven a la experiencia que propone “Piperline”, con una caída máxima de 33,5 metros a una velocidad de 96,5 kilómetros por hora, van sobre esa tabla sostenidos por unas estructuras dinámicas que permiten sentir cada inclinación y cada curva “como si cabalgaran sobre las olas”.
Así reza la publicidad de la nueva atracción de Seaworld, cuyo recorrido es de 900 metros y fue diseñada y construida por la empresa Bolliger & Mabillard (B&M).
Seaworld Orlando, situado en el condado Orlando, es un parque temático y a la vez un zoológico de animales marinos inaugurado en 1973.
Operado por SeaWorld Parks & Entertainment, el parque organizó una serie de espectáculos de temática surfera con músicos y bailarines para presentar su nueva atracción, que es su séptima montaña rusa.