La cantante colombiana, durante este tema, acusó a su ex pareja de ser “tacaño” al no pagar la indemnización de Lili Melgar, niñera de Milan y Sasha, después de despedirla por presuntamente descubrir su infidelidad con Clara Chía Martí.
Esta crítica hizo que un gran número de personas aplaudieran la actitud solidaria de Shakira y la forma en la que trata a las personas que trabajan junto a ella.
Sin embargo, en las últimas horas salieron a la luz declaraciones que aseguran que la intérprete de Monotonía, a diferencia de lo que se piensa, no trata de la mejor manera al personal que tiene a su servicio.
Por medio de una charla en el programa Espejo Público, el periodista Javier Ceriani reveló que muchos de los trabajadores de Shakira se quejan de la forma en la que son tratados.
Además, aseguró que uno de ellos sufrió una cruel injusticia al ser despedido por “no calentar un pollo a las 2 de la mañana” luego de trabajar todo el día.
“Ellos se quejan de que, para Shakira, no había fin para el trabajo. Eran 17 horas, cocinar para muchísima gente… Un domingo, habían cocinado para 17 personas y ella quería que se calentara un pollo a las 2 de la mañana y él le dijo: ‘No puedo más, no voy a hacerte el pollo’. Ella, automáticamente, los echó a las 6.30 horas y los dejó en la calle”, mencionó.
“Con la casa lo que pasaba es que no tenía fin, los empleados vivían en esa casa, no tenían seguro médico, no tenían estatus legal. Tenían que ser, no digo esclavos, pero era o regresar a Colombia o trabajar a merced de ella, que es cocinar en cualquier momento, atender a todos los que venían a trabajar…”, continuó diciendo el periodista.
Finalmente, Javier Ceriani indicó que, con el fin de mejorar su imagen, Shakira le habría pagado una fuerte cantidad de dinero a las personas que tuvo como empleados para poder dejar en mal a Gerard Piqué y tacharlo de “tacaño”.
“Para poder hacer esta canción, la de El Jefe, Shakira tuvo que pagarle a toda la gente que tuvo en toda su vida como empleados, incluida esta mujer, Lili, le pagó casi US$1 millón. Tuvo que pagar todas las deudas para poder acusar, ahora sí, a Piqué, de ser el tacaño”, concluyó.