La cantante asomó la cabeza por una cortina negra entre bambalinas que se corrió momentáneamente para revelar uno de sus pechos. “¿Qué está pasando?”, dijo la anfitriona de la ceremonia. “Ay, perdón. Mi seno está al aire”.
MTV dijo que cortó el inesperado destello de piel para las retransmisiones de la gala. A la mañana siguiente ya nadie habló más del tema.
El inconexo discurso de aceptación de Kanye West de un premio a la trayectoria, y su declaración de que se lanzará a la presidencia en el 2020, era el tema candente del programa, conocido más por generar momentos raros de la cultura pop que por sus premios.
Sin mayor revuelo
Eran un lugar y un momento completamente diferentes cuando el pecho de Jackson en el espectáculo del medio tiempo del Super Bowl de 2004 provocó 1.4 millones de quejas ante la Comisión Federal de Comunicaciones -FCC, por sus siglas en inglés-.
La FCC le impuso a la CBS una multa de US$550 mil por el incidente, un veredicto que se estuvo arrastrando en las cortes hasta el 2012, cuando fue anulado.
La FCC no tenía recolección de quejas sobre Miley Cyrus el lunes, y de cualquier modo no importarían mucho: la comisión federal no tiene jurisdicción sobre los canales de cable o satélite.
El Super Bowl del 2004 fue visto por unos 86 millones de televidentes. La compañía Nielsen no tenía una cifra inmediata para los Premios MTV; la audiencia del año pasado fue de 8.3 millones de espectadores.
“El factor de shock se ha desgastado”, dijo la reportera de entretenimiento Alicia Quarles. “Uno puede ver ir a Internet y ver los pezones de Rihanna en su cuenta de Instagram. Ya no hay nada emocionante al respecto”.
De igual modo, no hay que esforzarse demasiado para ver los pechos de Cyrus. La cantante de 22 años, otrora una niña estrella, ha posado desnuda o topless para un puñado de revistas en los últimos años.
Y debido a que los momentos riesgosos, como cuando Cyrus perreó con Robin Thicke en la ceremonia del 2013, son característicos de los Premios MTV a los Videos Musicales, un breve vistazo a su seno no puede considerarse sorpresa.
“Estuvo prácticamente desnuda la mitad del show”, dijo Quarles, exeditora global de espectáculos de The Associated Press.
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