El diario Daily Mirror reveló que Kirk Douglas dejó la mayor parte de su fortuna de 61 millones de dólares a instituciones de caridad.
En total, Douglas dejó 50 millones de dólares a instituciones como la Universidad St. Lawrence, el Templo Sinaí de Westwood, el Kirk Douglas Theatre de Culver City y el hospital de niños de Los Angeles.
Las donaciones serán realizadas por la Douglas Foundation, una fundación creada por el actor para “ayudar a aquellos que no pueden ayudarse a sí mismos”.
Los US$11 millones restantes habrían sido dejados a diferentes miembros de su familia, aunque no a Michael, reportó Infobae.
La relación entre padre e hijo transitó momentos de fuerte tensión, debido al quiebre de la relación entre Kirk y la madre de Michael, cierta competencia laboral entre ambos y los problemas de adicción de su primogénito.
Aunque también mantuvieron una relación cercana y llevaban un buen tiempo reconciliados, por lo que no está claro si la decisión de Kirk de no incluir a Michael, varias veces más rico que él, en su testamento tenga que ver con este pasado.