El primer ministro iraquí, Mustafa al Kazemi, se encargó de la reapertura y de la inauguración de la exposición de las piezas recuperadas, indicó la oficina de prensa en un comunicado.
El museo cerró al inicio de la pandemia, en 2020, y las autoridades iraquíes aprovecharon para llevar a cabo una rehabilitación y trabajos de mantenimiento en sus salas.
Durante el tiempo en el que ha permanecido cerrado, Estados Unidos, Países Bajos, Japón, Italia y el Líbano ha devuelto miles de piezas arqueológicas que habían sido robadas y sacadas de Irak, principalmente durante la invasión estadounidense del país en 2003.
Algunas de ellas forman parte de una nueva exposición que se puede ver a partir de ahora en el museo y que incluye objetos que datan de los periodos sumerio (años 4500-1900 a.C.), acadio (siglos XXIV-XXII a.C.), asirio (XIX y XVIII a.C.) e islámico (a partir del VII d.C.), explicó a Efe el director de medios de la Autoridad General de Antigúedades, Hakem al Shamri.
Estados Unidos devolvió a Irak unas 17.000 piezas, la mayoría tabletas de arcilla que datan del año 4500 antes de Cristo y posteriormente devolvió al país árabe la Tabla de Gilgamesh, una tablilla de 3.500 años de antigüedad con un poema sumerio en escritura cuneiforme considerado como una de las primeras epopeyas de la historia.
Durante la invasión estadounidense de 2003 para derrocar al exdictador Saddam Hussein, ladrones y traficantes asaltaron museos y lugares arqueológicos, especialmente el Museo Nacional Iraquí, y se estima que fueron saqueadas alrededor de 15.000 piezas solo del Museo Nacional de Irak.
En los últimos años, el país ha logrado recuperar miles de estas piezas en cooperación con los gobiernos de los países adonde fueron trasladadas las reliquias.