Vilma Palma e Vampiros hicieron una parada en Guatemala como parte de su gira Rock & Love, y más que comunicarse con palabras a quienes dijeron sí a esta cita, lo hicieron por medio de sus canciones; una tras otra sin pausa, las que el público coreó y celebró a gritos.
Gómez, vestido con un pantalón de lona azul desteñido, playera negra con el estampado de una calavera con la frase Love/ET y el cabello corto, cantó y bailó por todo el escenario.
El grupo derrochó energía y sonó “más roquero”, como Gómez había adelantado a Prensa Libre. La algarabía se desbordó cuando el grupo interpretó los éxitos A dónde vas, Bye bye, Fondo profundo, Estar con vos y Mojada, así como temas de su más reciente producción discográfica. Pero fueron los clásicos Auto Rojo y La Pachanga, los que enloquecieron a sus fanes.
Un poco de historia
Vilma Palma e Vampiros visitó por primera vez Guatemala en noviembre de 1994, luego en mayo de 1995, como parte de una gira latinoamericana.
La banda de rock comenzó actuando en clubes nocturnos de la ciudad de Rosario, Argentina. Su nombre fue tomado de un grafiti escrito sobre las persianas metálicas de una mueblería de la que habían despedidos a varios empleados y contra la gerente decía: “Vilma Palma e hijos Vampiros de los Obreros, Revolución obrera”. Con el paso de los años ese letrero se fue borrando y quedó solamente Vilma Palma e Vampiros, que inspiró a los músicos adoptar el nombre.