Protección
Todos los bloqueadores se caracterizan por tener las siglas SPF y un número. Esto es el factor de protección solar.
De acuerdo con Bran Quintana, este factor se determina mediante una ecuación del uso del bloqueador, dividido el uso sin protector solar. “Esto quiere decir que si una persona adquiere un eritema en su piel —que se pone roja— en un transcurso de 10 minutos, con un factor de protección 20, va a necesitar 20 veces más ese tiempo para ponerse rojo. Es decir, con el protector, en lugar de 10 minutos, se necesitarán 200 para el eritema”, explicó.
Según estudios, un factor de protección 30 cubre el 92 por ciento de la radiación ultravioleta B, que es la más dañina; y un factor de protección 50 cubre un 97 por ciento.
“Yo recomiendo que se use arriba de 30 para el día a día”, señala.
Niños
A los pequeños del hogar se les debe aplicar bloqueadores especiales para niños a partir de los 6 meses de edad. “El 80 por ciento del daño solar se recibe antes de los 20 años. La literatura refiere que si un niño sufre tres quemaduras severas provocadas por el sol, en su infancia, aumenta el riesgo de padecer cáncer de piel en la edad adulta”, afirmó Bran. Señaló también que la creencia de que este tipo de cáncer solo aparece en tez blanca, es falso; todos deben protegerse por igual del sol.
Uso correcto
El protector solar, que ahora viene en varias presentaciones —en crema, en gel, en aerosol, etcétera—, debe aplicarse 45 minutos antes de exponerse al sol y, durante el día se debe estar aplicando por lo menos cada tres horas. “Las personas muchas veces lo aplican solo en el rostro, olvidando áreas que usualmente están bastante expuestas, como lo son los labios, las orejas, el cuello y el escote”, dijo el médico.
La forma ideal de aplicarlo es con la piel limpia y completamente seca. Se debe, además, poner la cantidad suficiente para cubrir toda la piel, es decir, no debe ser una capa delgada.
Si se visita la playa, el médico recomienda aplicar bloqueador en todo el cuerpo y si la persona va a nadar, que se vuelva a aplicar bloqueador al salir del agua.
Una vez la persona se ha expuesto excesivamente al sol sin protección, se recomiendan duchas constantes con agua fría, hidratar con cremas emolientes la piel y si el problema es más serio, lo mejor es ir con el especialista.
Hay que saber
De acuerdo con el dermatólogo Bran Quintana, no se recomienda el uso de bronceadores bajo ninguna circunstancia.
“Los bronceadores aceleran el proceso de daño del ADN de las células epidérmicas, entonces lo único que se está haciendo con su uso es precipitar los efectos negativos que el sol, ya de por sí, provoca”, explicó.
El especialista agregó que hay muchas personas que también tienen la costumbre de usar bebidas y otros productos para broncearse, lo cual puede causar reacciones fotoalérgicas.
En lo que respecta al bronceado artificial, el médico comentó que hay muchos países en los que están prohibidas las cámaras de bronceado, ya que se ha demostrado el efecto cancerígeno a largo plazo por su constante uso.