Los precedentes del retroceso causados por los daños climáticos han provocado que muchas personas tomen conciencia desde la incertidumbre y busquen acciones mediadoras para el planeta.
En Guatemala, la organización Plantemos, nacida en 2012, busca generar incidencia en la población a través de la reforestación. Hasta la fecha han fomentado que se planten cerca de 220 mil árboles nativos en 15 departamentos del país.
En seguimiento a esa meta regenerativa, y a propósito del evento cívico que engloba los 200 años de independencia oficial de Guatemala, los organizadores dieron vida al proyecto Bosque Bicentenario, mediante el cual trazaron una meta para sembrar 200 mil árboles en 2021.
José Carlos Moreno Baca, director y fundador de Plantemos, comparte que el plan inició en mayo de este año y finalizará en dos jornadas de este mes. Señala que el total de árboles plantados superará incluso los 200 mil estipulados inicialmente, puesto que se llegará a un total de 250 mil plantaciones, gracias a un mayor involucramiento de voluntarios, así como de la producción de árboles.
El cierre de esta fase concluirá con jornadas que se realizarán el 5 y el 12 de septiembre. En la primera fecha se harán plantaciones en Guatemala y Quetzaltenango, mientras que durante la segunda se realizarán en Sacatepéquez, Quiché y nuevamente Quetzaltenango. Estos sembrados complementarán los otros que ya se han realizado este año en Huehuetenango, Chimaltenango, Alta Verapaz y Petén.
“Queríamos hacerle un regalo a Guatemala. Con estos árboles impactaremos la vida de casi 2 millones de guatemaltecos”, comenta Moreno Baca. El director de Plantemos argumenta que los efectos de los 250 mil árboles podrían fijar 80 mil toneladas de dióxido de carbono y aportar a la recuperación de cuencas hidrográficas, lo cual apoyaría a la absorción de 3,2 millones de metros cúbicos de agua.
El proyecto contempla de igual manera la recuperación de zonas protegidas que hayan sido dañadas por incendios forestales provocados y también los espacios donde sea necesaria la restauración forestal para combatir la perdida de microecosistemas.
Con estas plantaciones, la recuperación de bosques amerita un compromiso que para los integrantes de Plantemos va más allá de una muestra de solidaridad medioambiental. Para lograr los proyectos gestionados durante los últimos nueve años, los miembros han estudiado las regiones geográficas, sus necesidades, y la importancia que tienen algunas especies de árboles para las zonas.
“Planificamos donde plantaremos porque los bosques no son de una sola especie”, comparte el director quien comparte que, en el marco del Bosque Bicentenario, se han sembrado árboles de pino, ciprés, jacaranda, ceiba petandra, matilisguate, encino, limón y níspero.
En cada jornada de reforestación los miembros de Plantemos se acompañan de voluntarios de todas las edades. A la fecha, cerca de 25 mil personas han colaborado en esta misión. El espacio está abierto para que más interesados se unan e involucren en la transformación medioambiental.
Para más información del proyecto se puede consultar el sitio web del proyecto o en su Facebook.