Los expertos en psicología afirman que, si bien es cierto que el cansancio y estrés se va acumulando conforme pasan los días y por eso es conveniente descansar el fin de semana, el estado de relajación lo deberíamos buscar a diario con pequeñas acciones que nos ayuden a equilibrar nuestro tiempo libre y el trabajo.
La sensación de relajación la podemos sentir muchas veces cuando, por ejemplo, luego de un día cansado en el trabajo y pasar varias horas en el tráfico por fin se llega a casa. Saber que ya está en su hogar da una alerta al cerebro de que ya está en un lugar seguro y puede comenzar a relajarse. Sin embargo, sigue precavido a cualquier situación que pueda ocurrir, por lo que para alcanzar un estado de relajación total hay que ayudarlo con ciertas acciones.
“Llegar a casa no significa que vamos a estar sin hacer nada. En varios casos hay que cuidar a los niños, a revisar sus tareas, a cocinar, a limpiar, incluso a preparar el trabajo del día siguiente. A pesar de lo que tengamos que hacer debemos dedicar al menos una hora para nosotros mismos y así liberar las tensiones”, afirma Gerber Solís, coach de vida. De lo contrario los efectos se verán en nuestra salud, ya que se puede presentar sobrecargas musculares, problemas cardiovasculares como hipertensión, etc.
“El tiempo libre es una obligación”
Todos tenemos derecho a disfrutar el tiempo libre a pesar de que tengamos muchas cosas que hacer. El estrés agota al cuerpo y a la mente, por lo que se requiere un extra de relajación para continuar siendo productivos. Esta compensación de tranquilidad favorece el equilibrio personal.
El problema, según el coach de vida, consiste en que al saber que tenemos muchas cosas que hacer en lo menos que pensamos es en descansar, porque tenemos el tiempo limitado. Es más, ni siquiera incluimos tiempo libre en nuestra agenda y hasta los horarios de las comidas se reducen.
“Muchos consideran que aumentar el tiempo de ocio cuando estamos muy ocupados es contraproducente porque lo que más deseamos es alargar las horas para cumplir con nuestras obligaciones. Dedicar una hora a un pasatiempo o 30 minutos para hacer respiraciones que nos ayuden a concentrarnos podría solo aumentar el estrés pensando en todas las cosas que tenemos que hacer. Así generamos más ansiedad y nos aturdimos”, dice.
Sin embargo, el tiempo libre es fundamental para mantener el equilibrio de la mente y el cuerpo. Es el momento que nos beneficia en liberar la tensión acumulada y prepararnos para la siguiente actividad, aún sea más estresante que la anterior. “El tiempo libre es una obligación. Descansar nos carga de energía y así podemos ser más productivos después”, añade Solís.
Sentimiento de culpa
Debido a que no se considera al tiempo libre una prioridad es importante ir incluyéndolo poco a poco en nuestra rutina. Carolina Herrera, psicóloga clínica, indica que el sentimiento de culpa se podría presentar si luego de un día estresante en el trabajo llegamos a casa a ver nuestra serie favorita cuando podríamos avanzar en otros pendientes que seguramente nos aturdirán al día siguiente.
La profesional indica que ante esta sensación lo ideal es conocer nuestras necesidades y metas en el tiempo de ocio. La recomendación es hacer una lista de cosas que se pueden llevar a cabo y disfrutar en este espacio para que con la rutina se le tome más valor a las horas libres que tendremos durante el día. Por ejemplo, uno de los objetivos del tiempo libre puede ser aliviar una mente fatigada o mejorar el estado de ánimo, entonces se analiza qué actividades ayudan a conseguirlo, quizá escuchar su música favorita, leer su libro del mes o ver una serie; también visitar un lugar con área verde.
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“Creemos que ser productivos está asociado solo a nuestro trabajo. Sin embargo, también podemos ser productivos cuidándonos a nosotros mismos, poniéndonos como prioridad. Muchas personas creen que el tiempo libre puede ser solo el fin de semana y consiste en viajar al mar o lugares que nos den paz. Claro que esa es una buena forma de aprovechar el tiempo de ocio, pero también se pueden llevar a cabo pequeñas acciones en nuestra casa todos los días”, opina Herrera.
Cómo descansar en casa
El simple hecho de estar en casa ya nos genera sensación de relajación y bienestar. Sin embargo, se puede potencializar con acciones que nos hagan despejar la mente y concentrarnos solo en actividades que nos produzcan placer.
Desde quitarse los zapatos y ponerse ropa cómoda, hasta acariciar a su mascota o pasar tiempo con su familia son actividades que le ayudarán a relajarse en casa. A continuación, se enlistan algunas acciones que disminuirán el estrés.
Dejar el trabajo en la oficina
Lo más importante, según el psicólogo Guillermo López, para alejarnos de los problemas que nos aturden la cabeza a diario es dejarlos en el lugar físico al que corresponden. Es decir, los problemas de casa dejarlos allí cuando vamos a trabajar, asimismo con los del trabajo.
Al llegar a casa se debe dejar el trabajo en la oficina. No permita que este se interponga en su tiempo libre, menos los fines de semana. En caso de que tenga algo muy importante que hacer, lo ideal es que lo termine en la oficina, aunque salga un poco más tarde, a que lo haga en casa.
Un baño con agua tibia
En las mañanas, con la prisa por llegar puntual al trabajo, es difícil tomar el tiempo para darse un buen baño relajante, por lo que puede optar por tomar uno al llegar a casa o antes de dormir.
Un baño relajante consiste en usar agua tibia, velas aromáticas o aceites, música relajante y si desea, su bebida favorita. Trate de no pensar en los pendientes o en los problemas, sino que disfrute este momento sin ninguna prisa o culpa. Bañarse con agua caliente relaja los músculos, reduce la fatiga del cerebro, calma la ansiedad, entre otros beneficios.
Meditación
No es un secreto que la meditación ayuda cuando se está ansioso, tenso y preocupado. Es una de las prácticas más efectivas para lograr relajarse y, además, no requiere ningún equipo especial y cualquiera puede llevarla a cabo.
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La meditación sirve para aprender a ser más consciente de las sensaciones y emociones que tenemos. Con ella logramos liberar pensamientos obstructivos que no nos dejan avanzar ni alcanzar la tranquilidad. Además de cursos y guías de meditación, en Internet existen diferentes recursos para principiantes, por ejemplo, las aplicaciones Omvana y Headspace, ofrecen meditaciones guiadas.
Practicar pasatiempos
Dedicar al menos una hora al día para sus pasatiempos marcará su rutina de forma positiva. Cocinar, pintar, armar rompecabezas, cantar o bailar son algunas de las aficiones que puede realizar en casa a diario. Los expertos indican que leer un libro o ver su serie favorita, aunque no todos lo consideran un pasatiempo, tiene los mismos beneficios de relajación.
El objetivo es mantener la mente ocupada en cosas que le resulten placenteras y que logren que el estrés disminuya. “Ver películas o jugar videojuegos de mucha acción, que varias veces solo nos estresa más o genera ansiedad se deben evitar al menos dos horas antes de dormir”, dice López.
Tomar té relajante
Antes de ir a dormir o mientras practica su pasatiempo puede consentirse con una infusión que ayude a relajarse. Además, le será de ayuda para dormir mejor y tener un descanso reparador. Un té que siempre ayuda puede hacerlo con una taza con agua caliente 3 hojas de menta, una cucharada de jengibre rallado y un poco de miel.
Una cosa a la vez
Cuando llegamos a casa varias veces tenemos los mismos niveles de ansiedad y estrés que en el trabajo, por lo que queremos hacer todo rápido y al mismo tiempo para terminar lo más pronto posible e ir a descansar. Sin embargo, la recomendación es hacer una cosa a la vez, sin querer abarcarlo todo.
Querer recuperar el tiempo perdido haciendo las cosas rápido y al mismo tiempo solo es otra fuente de estrés.
Ejercicios de respiración
La aceleración con la que vivimos todos los días impide que prestemos atención a nuestra respiración. Por ello, dedique unos minutos para respirar y ser consciente de cómo llega el oxígeno a su cuerpo.
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La respiración profunda es una de las mejores maneras de reducir el estrés en el cuerpo, ya que cuando se respira profundamente el cuerpo envía una señal al cerebro para calmarse. Para mejores resultados existen diversos ejercicios de respiración y relajación.
