Estas molestias estarán presentes en cualquier etapa de la vida; desde la infancia, adolescencia, adultez y cuando se entra a la vejez.
Sin embargo, esta última etapa puede presentar dificultades en lo que respecta a la atención recibida. Se ha observado, no solo en Guatemala, sino en diferentes partes del mundo, una poca atención hacia los adultos mayores al momento de que se quejan de un dolor o molestia en alguna parte de su cuerpo.
Panorama en Guatemala
De acuerdo a Karin Olmstead, presidenta de la Asociación Guatemalteca de Geriatría y Gerontología, la atención hacia el adulto mayor es un tema que aún debe mejorar en Guatemala, tanto por parte de los cuidadores y personal de salud, como de los familiares.
“Hay muchísimo que mejorar. Realmente el tema de salud del adulto mayor aún es bastante invisibilizado en Guatemala, a pesar de que ya hay muchos más geriatras que en años anteriores”, explica la experta.
Olmstead asegura que aún falta camino por recorrer en el campo de la atención del adulto mayor, principalmente en los centros de salud y los cuidadores encargados de esa área.
“Nosotros definitivamente debemos mejorar en muchos campos del adulto mayor, tanto en el campo físico como el emocional, porque muchos son discriminados, incluso a muchos se les dice “abuelitos” cuando no es correcto llamarlos de esa forma”, agrega la geriatra.
Falta de conocimiento
Una de las principales razones de la falta de atención hacia los adultos mayores, tanto por parte de familiares como de cuidadores, es la falta de conocimiento de los padecimientos que puede tener una persona a esa edad.
“Muchas veces a las personas no les interesa la condición del adulto mayor, motivo por los que se le discrimina y no se le tiene paciencia, entonces ocurren esos casos donde dicen los familiares ‘otra vez se está quejando el abuelo'”, explica Olmstead.
Falta de empatía
La geriatra Irene Barrera menciona que otra de las complicaciones que se presenta en el cuidado del adulto mayor es la falta de empatía y cariño de parte de los familiares y cuidadores.
“Hay casos en donde los familiares llevan al adulto mayor a un centro médico cuando este ya es visto como una molestia para ellos, porque la familia ya no se quiere hacer cargo. Realmente un adulto mayor es como cualquier otra persona y se debe tratar con el mismo respeto que como se tratan a otras personas de otras edades”, explica Barrera.
No prestar atención a las quejas del adulto mayor también llega a ocurrir, según cuenta Barrera, cuando se lleva a la persona a una consulta y no se le deja expresarse sobre sus dolencias.
“Por ejemplo, en las tomas de decisiones, he visto muchas veces que no se le toma en cuenta al adulto mayor. Por ejemplo, los familiares lo llevan a una consulta y uno como geriatra se debe dirigir al adulto mayor, pero los familiares no dejan que la persona se exprese“, cuenta la geriatra.
Prevención
Barrera asegura que es igual de importante implementar acciones enfocadas en la prevención de la salud del adulto mayor, y no solo cuando la persona empiece a quejarse por alguna molestia.
Por otra parte, Olmstead recomienda a los familiares y cuidadores que, en el momento en que el adulto mayor exprese dolor en alguna parte de su cuerpo, es importante llevarlo a un centro médico, consulta o con un geriatra, ya que se debe investigar cuánto antes las causas de ese dolor.
“Hay que investigarlo, y no solo darle medicamento y creer erróneamente ‘ya se le pasará’. La mayoría de las molestias o dolores que presenta un adulto mayor están bien fundamentadas”, dice la experta.
Dolores más comunes
Las dos expertas señalan algunos ejemplos de los dolores más comunes que suelen presentar los adultos mayores y que en la mayoría no son atendidos por familiares y cuidadores, ya sea porque son complicaciones que erróneamente se piensa que van a pasar con medicina o con el pasar del tiempo:
- Dolores de cabeza
- Problemas estomacales como diarrea
- Dolores de rodilla
- Dolores de columna o espalda
- Dolores en brazos y extremidades
Las expertas señalaron que para los casos en donde el adulto mayor presenta problemas relacionados a las músculos y huesos en alguna de sus articulaciones, es recomendable asistir con un quiropráctico, mientras que los familiares también deben considerar la idea de visitar un nutricionista junto al adulto mayor, de esa forma se analiza la alimentación del adulto y que no genere problemas a largo plazo.
Barrera señala que hay que tener en cuenta que el campo de la geriatría se apoya en otras especialidades de la medicina para el cuidado de los adultos mayores, por lo que es importante acudir a otros expertos como lo puede ser un cardiólogo si el adulto presenta problemas en el sistema circulatorio, o un gastroenterólogo si se presentan complicaciones estomacales.
Recomendaciones
Las dos expertas en geriatría coinciden que en la comprensión, la empatía y la investigación constante sobre el cuidado del adulto mayor son claves para que no se presenten situaciones negativas en donde se haga de menos o se ignoren sus dolores.
“Todos los que tenemos adultos mayores debemos que leer y aprender acerca del envejecimiento, no solo para ayudar a estas personas, sino también para ayudarnos a prepararnos a nosotros mismos cuando lleguemos a esa edad”, explica Olmstead.
La experta también agrega que, una de las cosas más importantes es tener el deseo genuino de cuidar al adulto mayor, ya que asegura que en muchas ocasiones ocurre que los familiares cuidan a la persona más por obligación que por un auténtico interés en su salud.
Barrera por su parte recomienda hacer acciones a favor de la prevención del adulto mayor, no solo en temas de cuidados médicos y chequeos, sino en asegurarse que los campos de su vida sean saludables y beneficiosos.
“Un adulto mayor hay que tratarlo integralmente y en todos sus campos, tanto físico como emocional. Por eso hay que fomentar que tenga una dieta estable, una alimentación equilibrada, que haga ejercicio y que se encuentre activo el mayor tiempo posible con actividades que sean de su agrado”, afirma Barrera.