La osteoporosis es una enfermedad metabólica progresiva que disminuye la densidad ósea, con deterioro de la estructura del hueso, debilidad esquelética la cual produce fracturas por traumatismo mínimo o inaparente, especialmente en zonas tales como la columna torácica, lumbar, muñeca y cadera. Es frecuente el dolor de espalda agudo o crónico.
A partir de la menopausia esta pérdida se acelera en las mujeres y, en hombres, cuando llegan a la edad adulta. En Guatemala, los estudios demuestran que una de cada tres mujeres de más de 50 años la padece.
Factores de riesgo
Son más propensas a desarrollar osteoporosis las personas con muy bajo peso, que tienen una ingesta insuficiente de calcio y fósforo, falta de Vitamina D, exceso de tabaquismo, alcohol, uso de ciertos medicamentos como anticonvulsivos, tratamientos hormonales para el cáncer de próstata o de mama así como esteroides que se tomen por varios meses; así como disminución del estrógeno en mujeres al momento de la menopausia o de testosterona en hombres y antecedentes familiares.
La médica Myriam Paredes, de Farmacia Cruz Verde, señala que en Guatemala hay un gran número de personas que desconocen los síntomas de la enfermedad y las formas de prevenirlo, lo cual pone en riesgo su calidad de vida.
Es importante resaltar que la osteoporosis no produce síntomas en las etapas iniciales, en ocasiones, las personas tienen una fractura antes de saber que padecen la enfermedad. También pueden perder estatura (hasta 15 cm) con el tiempo y desarrollar una postura encorvada o una afección conocida como joroba.
El diagnóstico se realiza mediante una radioabsorciometría de doble energía (DEXA, en inglés), conocida como densitometría ósea. Esta es una radiografía de baja radiación que mide la densidad de minerales en sus huesos. Este examen se emplea para diagnosticar pérdida ósea y osteoporosis, predecir el riesgo de fracturas en el futuro, determinar cómo está funcionando un medicamento para la osteoporosis (únicamente con la DEXA central).
“Para prevenir esta enfermedad se recomienda tomar suplementos como vitamina C y D -para el fortalecimiento óseo a temprana edad-, practicar ejercicios para fortalecer los músculos paravertebrales y evitar esfuerzos exagerados al levantar objetos pesados”, comenta Paredes.
“Es de suma importancia mantener una alimentación balanceada, rica en calcio, actividad física y hábitos sanos”, puntualiza la profesional de Farmacia Cruz Verde.