“Nuestros ojos generan el 80 por ciento de los estímulos en el cerebro. El desarrollo de la vida depende mucho del buen cuidado de nuestros ojos”, dijo el oftalmólogo Fernando Noriega, ayer en El Consultorio, de prensalibre.com, con motivo del Día Mundial de la Visión, que se celebra el segundo jueves de octubre.
El experto, quien resolvió dudas sobre mitos y verdades de la salud visual, hizo énfasis en que toda persona, desde que nace, debe acudir con un especialista porque, aunque hay ciertos problemas de la vista que son hereditarios, muchos surgen “porque no se detectan ni se corrigen a tiempo”.
Prevención
En niños, unos de los problemas más comunes de la vista son el estrabismo, conocido comúnmente como “ojos desviados” y la ametropía —enfoque inadecuado de la imagen sobre la retina—.
“El 25 por ciento de la población escolar sufre de algún problema visual como miopía o hipermetropía”, resaltó el médico.
En recién nacidos, es importante que en los primeros 40 días de vida se revise su visión, pues “a veces se dan problemas de retinopatía prematura —tumor maligno en la retina— que pueden tratarse si se detecta a tiempo”, agregó.
En adultos, la incidencia de diabetes e hipertensión pueden incluso llegar a causar ceguera.
Noriega sugiere someterse a un chequeo anual o cada dos años y llevar un estilo de vida sano.
Mito
Todo es hereditario
Hay varios problemas visuales que son hereditarios, como el glaucoma en los adultos o las que se derivan de diabetes, por ejemplo. Sin embargo, muchos son adquiridos por no saber prevenirlos. Entre estos están aquellos generados por rubéola, herpes o toxoplasmosis en las mujeres embarazadas, indicó Noriega.
Verdadero
Productos de higiene afectan
Algunos productos que incluyen químicos pueden afectar la salud visual. Según Noriega, “los cosméticos, depende del lugar donde se apliquen, pueden causar daños al sistema glandular”. Para limpiarse el contorno de los ojos recomienda usar champú de bebés, cuyos componentes no irritan.
Verdadero
Al “ojo rojo” hay que prestarle atención
El famoso “ojo rojo” no solo sucede por la contaminación en la ciudad; también se deriva de la exposición a la luz y los rayos ultravioleta. La radiación hace que se parpadee menos, y esto lleva al ojo a buscar más oxígeno, expandiendo sus vasos y dándose el enrojecimiento de la zona.
Mito
Lentes, todo el tiempo
Algunos problemas requieren el uso de anteojos constante; otros, no. “Cuando son de miopía, hipermetropía y la combinación, astigmatismo, se recomienda usarlos todo el tiempo porque es la manera de estar cómodos”, dijo Noriega. Para la presbicia —vista cansada—, solo cuando se va a leer.
Verdadero
Lo que se come es clave
“El valor de la dieta es muy grande”, dijo el oftalmólogo Fernando Noriega. Hay que evitar la comida procesada y aumentar el consumo de frutas y verduras, en especial las verdes que tienen antioxidantes; y las de color naranja que son ricas en betacarotenos, que tienen una acción especial en la visión nocturna.
Mito
Todos los colirios sirven
Es sumamente importante consultarle al oftalmólogo qué colirios usar. Noriega explicó que muchas soluciones incluyen esteroides, los cuales, con el uso crónico, pueden ocasionar glaucoma, que es irreversible y causa ceguera. “Lo que sí se puede usar libremente son lubricantes”, dijo el experto.
Mito
Las cataratas solo afectan en la adultez
Cuando se habla de cataratas se refiere al cristalino, el “lente” más importante detrás de la pupila. Desde infecciones pasadas de la mujer embarazada al niño, hasta golpes y procesos naturales en la tercera edad, las cataratas pueden afectar en cualquier momento.