En la década de 1970 se comenzó una investigación en la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, más conocida como NASA, para encontrar un modo de facilitar la vida en la luna tratando y reciclando aire en sistemas ecológicos cerrados. Descubrieron que las plantas poseen una asombrosa capacidad para purificar y revitalizar el aire, sobre todo si están bien sellados para conservar el calor y carecen de ventilación natural.
“Los contaminantes más comunes y que las plantas se encargan de filtrar son benceno, xileno, amoníaco, tricloroetileno y formaldehído, según el estudio publicado.
Entre las plantas que exploró la NASA, están el aloe, anturio, begonia, crisantemo, gerbera, helechos, tulipanes, entre otras. En general se recomienda tener variedad porque cada una ayuda a eliminar distintas sustancias químicas.
En la actualidad
Un nuevo estudio señala ahora que la combinación y disposición adecuadas de las plantas en interiores pueden favorecer la absorción de gases y compuestos nocivos dentro de los espacios cerrados y edificios donde, según algunas estimaciones, las personas pueden pasar hasta el 90% de su tiempo.
Según Fraser Torpy, académico de la Universidad Tecnológica de Sídney (UTS), y Ambius, una empresa de “soluciones de paisajismo vegetal”, una mezcla de plantas frondosas -como helechos y drácena- dispuestas en forma de “muro verde” puede ser “muy eficaz para eliminar contaminantes nocivos y cancerígenos”.
Y aunque trabajos anteriores sugieren que las plantas “pueden eliminar una amplia gama de contaminantes del aire interior”, la investigación de UTS/Ambius es, según quienes la publican, “el primer estudio sobre la capacidad de las plantas para limpiar los vapores de gasolina”, que causan irritación pulmonar y dolores de cabeza y se relacionan “con un mayor riesgo de cáncer, asma y otras enfermedades crónicas”.
Bien hecho, el “muro verde” puede absorber más del 90% de las toxinas del aire circundante “en solo ocho horas”.
Vale entonces la pena respirar hondo y asimilar todo esto, ya que, según cálculos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el aire tóxico de interiores mata a unos 6.7 millones de personas al año en todo el mundo.
“Las plantas no solo pueden eliminar la mayoría de los contaminantes del aire en cuestión de horas, sino que también eliminan del aire los contaminantes más nocivos relacionados con la gasolina con mayor eficacia; por ejemplo, el conocido y cancerígeno benceno es asimilado a un ritmo más rápido que otras sustancias menos nocivas, como los alcoholes”, explica Torpy.
“La conclusión es que la forma mejor, más rentable y más sostenible de combatir los contaminantes nocivos del aire interior en el lugar de trabajo y el hogar es introducir plantas“, afirma asimismo el director general de Ambius, Johan Hodgson.
Prepare sus espacios
En general, si usted quiere unirse a los favores de las plantas en mejorar los ambientes interiores es importante reconocerlas como un ser vivo que necesita atenciones y cuidados.
El ideal es acudir con los expertos para que le comenten cuáles son los más apropiadas para colocar dentro de los espacios interiores y también la frecuencia del riego. El paisajista Gustavo Lainfiesta, del vivero Botanik, comparte que ellas nos hablan por medio de su apariencia, por ejemplo, cuando necesitan agua, la tierra suele estar un poco seca o no tan húmeda, o bien las hojas podrían estar un poco marchitas.
Además del riego se sugiere poner cada tres meses un poco de abono líquido para mantenerlas fortalecidas.
Se recomienda repartir las plantas por toda la casa para que ayuden a limpiar y purificar el aire. Aunque viva en espacios pequeños disponga de macetas en la sala, cocina, el baño y las habitaciones, no se olvide de las zonas de estudio o de oficina, además de aquellas que disponga para el jardín.
Si esto no es posible integre ramos de flores en algunas de las áreas, en este caso mantenga el agua limpia porque la energía estancada del agua sucia resulta perjudicial.
¿Cuáles tener?
Incluimos una breve selección que recomienda el paisajista Gustavo Lainfiesta.
Sansevieria
También conocida como “orejas de burro”, es una de las más comunes en ambientes interiores porque se adapta a condiciones de poca luz y aire fresco; además porta mucho oxígeno, lo cual refresca el lugar y mantiene el aire limpio. Existen de diferentes colores y patrones según la variedad, la más común es verde oscuro con líneas de un tono más pálido.
Orquídea mariposa
El nombre científico es Phalaenopsis y está de venta en diferentes viveros y por lo regular utilizan recipientes plásticos o de vinilo, es decir transparentes, de esta manera reciben luz en sus raíces.
La planta debe regarse evitando la sequedad total de la corteza y nunca demasiada agua. Se sugiere un abono especial para orquídeas.
Cuna de Moisés
El Spathiphyllum resulta una excelente opción para interiores. Es una planta tropica y necesita claridad pero sin recibir luz solar directa porque podría dañarla. Se debe regar un par de veces a la semana, o cuando se vea que la tierra esté seca.
Anturio
El anthurium necesita de una buena iluminación, pero no del sol directo. Se recomienda colocarlo cerca de una ventana. Evite el exceso de agua en sus raíces. Por lo regular se riega una vez por semana.
Tiene variedad de colores como el rosado, rojo, blanco, el chocolate y otras. Hay una variedad de tamaños, incluyendo las enanas (que alcanzan los 25 centímetros de alto y ancho), medianas (de 40 centímetros de alto y ancho) y las altas (con 50 centímetros de alto y ancho).
Helechos
Los helechos en general son plantas de interior. Es importante vigilar su riego y abono. Aunque toleran lugares con sombra necesitan luz, pero evitando los rayos directos del sol. Es aconsejable vaporizar sus hojas para mantenerlo fresco.
Cámbielo de lugar o trasplante cuando el tamaño sea del doble que la maceta original. Esto permitirá que no se dañen las raíces.
Aglaonema
Es una planta herbácea de carácter perenne e ideal para interiores y puede estar en habitaciones o en la oficina.
Esta planta dura entre 15 y 20 años. No es recomendable para hogares con niños o mascotas. Es una planta tóxica.
Para purificar el ambiente
Si usted quiere conocer otros detalles para tener un ambiente sano considere estos consejos.
- La iluminación. Las ventanas nos permiten mantener contacto con los ciclos del mundo natural exterior ya que existimos en un entorno controlado artificialmente. Así que es importante tomarlas en cuenta en los ambientes que utilizamos.
- Cuidado con los ácaros. Convivimos con los ácaros, animales microscópicos y existen más de 50 mil tipos de ellos y muchos otros sin clasificar. Miden menos de 0.5 mm y son de la misma familia que las arañas, se instalan en los dormitorios y en especial en la almohada, las sábanas, colchones y otros textiles. Cuando se tiene una alergia es vital eliminar en lo posible las fuentes de los ácaros. Así que evite el uso de alfombras, cortinas y otros materiales textiles. Será conveniente además ventilar la habitación durante el día, ya que estos mueren con la luz del sol.
- Ventilación. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. (CDC) comparten que es importante permitir el ingreso de aire fresco del exterior a su hogar ya que ayuda a evitar que se acumulen partículas del virus en el interior. Se sugiere abrir puertas y ventanas tanto como pueda para que ingrese aire fresco del exterior.
- Evite fumar. Las áreas de fumadores y no fumadores compartidas, o las áreas de fumadores en edificios que comparten un sistema de ventilación común contaminan el aire limpio con aire contaminado. La Organización Panamericana de la Salud comenta que los entornos sin humo son esenciales para proteger a los no fumadores, así como para alentar a los fumadores a dejar de fumar.
