Resiliencia es la capacidad de resistir y avanzar a pesar de las dificultades de la vida, que está llena de obstáculos. En algunos casos estos son altamente traumáticos, y casi nunca se pueden evitar ni controlar. Estos eventos algunas veces provocan miedo e inseguridad.
Los autores indican que, no es el evento lo que afecta, sino la forma en que la persona percibe la situación. Es decir, de la actitud que se tenga hacia los sucesos de la vida, dependerá el futuro. Esto significa que el ser humano puede ser resiliente en cualquier etapa de su vida, claro, si así lo desea.
En la historia de la humanidad hay muchos ejemplos de quienes lograron hacerse resilientes, que afrontaron el miedo y que, en lugar de tomar la situación como algo destructivo, aprendieron de este y buscaron el sentido de su vida, no solo para sobrevivir, sino para vivir en plenitud.
¿Cómo lograrlo?
Debe aceptarse que no se nace con una lista de “qué hacer en caso de…”, se va aprendiendo de las relaciones familiares, escolares, laborales y sociales que se dan durante la vida y que van cambiando constantemente. Es decir, el encuentro con las otras personas es fundamental para la experiencia humana. Todos aprendemos de todos, sin importar el estatus social, cultural, económico, religioso o político. Todos tenemos algo que enseñar, pero también algo que aprender.
Acepte que, aunque quiera, no puede controlarlo todo, es imposible y además cansado, frustrante, se ganan enemigos y se convierte en una persona bastante desagradable y solitaria. Si insiste en ser controlador solo evidenciará sus inseguridades y sus miedos.
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Pero sea responsable con las cosas que sí puede controlar. Tome decisiones pensando en los pros y los contras que puede obtener; no juzgue sus decisiones como buenas o malas; es lo que en ese momento se tenía que hacer o podía hacer. Las decisiones que se toman dependen del contexto en que se presenten, de cómo se perciben y de las herramientas internas que se tienen en ese momento y, como tal, hay que enfrentarlas.
¡Pare de sufrir!
No se juzgue tan severamente. Las personas sufren por «lo que hicieron, lo que no hicieron y lo que debieron hacer». Esto no sirve de nada, solo hace que se vuelva más miedoso e inseguro y que se tropiece a cada momento con usted mismo.
Aprenda a observar, escuchar y autoevaluar sus respuestas, reacciones, actitudes y conductas hacia las diversas situaciones de la vida y hacia las otras personas. Tómese tiempo para enlistar de todas estas cosas y sepárelas por categorías: lo que aprendí de mí y lo que debo cambiar.
El verdadero problema del ser humano es que NO sabemos escuchar, somos egoístas y solo pretendemos que los demás nos oigan. Esto provoca no ponemos de acuerdo y que las conversaciones sean largos monólogos de cosas intrascendentes, insulsas o irrelevantes.
Aprenda a escuchar a otros, todos tienen algo que decir. Respete las opiniones ajenas, aunque no esté de acuerdo. Escuche con atención, es posible que algo de lo que digan le sirva en algún momento de su vida. Ahora, si la conversación se torna agresiva, tendenciosa o conflictiva, no opine, no es el momento. Retírese con educación, ningún tema es tan importante para robarle la paz interna.
Soy diferente
Todos somos diferentes. No significa ser bueno o malo, simplemente que pensamos, sentimos y actuamos de formas distintas. Acéptese como es, con virtudes y defectos. No alardee de sus virtudes, úselas para ayudar a los demás, evitando que sus miedos e inseguridades lo detengan. De sus defectos también puede aprender. Puede usarlos a su favor o modificarlos. Deje de copiar a los demás. No hay una lista de “cómo ser feliz”. La felicidad está dentro de usted; sea feliz a su manera.
Del lado de la resiliencia
Existen cientos de consejos para ser resiliente. Todo funciona si usted desea que funcione y es constante. Sea realista, pero no derrotista, tenga fe en la humanidad, establezca prioridades, modifique las conductas que le causan problemas, haga cambios en su vida, aproveche la oportunidad que la pandemia le está dando.
*Docente del Departamento de Psicología de la Facultad de Humanidades de la Universidad Rafael Landívar.
Envíe sus preguntas relacionadas con temas de familia a buenavida@prensalibre.com.gt. Especialistas del Departamento de Psicología de la Universidad Landívar responderán sus dudas.