A eso se le suma que nuestro cuerpo comienza a cobrar el tiempo que pasó sintiendo el calor de verano y los rayos del sol. El dolor en la piel lo delata.
Puede que la piel esté roja, una consecuencia de la exposición a los rayos del sol. O incluso se esté cayendo por pedacitos (o pelando, dirían en Guatemala). Esto porque las quemaduras hacen que se desprendan varios grupos de células a la vez.
Para tratarlo, aprovecha las horas antes de dormir para aplicar estos remedios caseros que pueden ayudar a aliviar el dolor y tratar la piel.
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Date un baño
Después de pasar un buen rato bajo la luz del sol, es recomendable ducharse. Lo importante es hacerlo con agua tiba: no caliente ni tampoco helada. Una tempratura fresca que ayudará a aliviar la picazón y puede evitar ciertas manchas. Cuidado con el secado después. Utiliza una toalla pero sécate con delicadeza.
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Aplica un remedio
Hay diferentes ingredientes caceros que pueden beneficiar la recuperación de la piel. Se puede aplicar mezclas de avena o maicena, que tienen atributos que sanan algunas quemaduras en la piel. También se puede usar aloe vera y aplicarlo en las zonas dañadas.
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Hidrata la piel
La vieja confiable: las cremas hidratantes deberían ser un artículo de uso diario. Pero al menos sí deberías usarlas con frecuencia después de una quemadura. Lo mejor es aplicarla después de cada baño, en buena cantidad para cubrir toda la piel.
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Evita rascarte
Sí, que pica, pero rascarte puede perjudicar aún más las heridas. Así como también debe evitarse el contacto, por lo que está bien si le dices a tus compañeros del trabajo que no te den golpes en la espalda.
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Bebe agua
Bueno, beber agua es algo fundamental en la vida de cada persona, pero lo importante es hacerlo siempre cuando sientas la necesidad de tomar; o, en otras palabras, cuando se tenga sed. No son necesarios los ocho vasos de agua al día. Cada persona necesita distintas cantidades de agua. Mantener hidratado al cuerpo ayuda a la recuperación de la piel.
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Colócate algo frío
Si la picazón continúa o sientes algún malestar, hielo dentro de una toalla o algún paquete helado por el refrigerador pueden ser una solución. Colócalo sobre la piel afectada por unos minutos, dejando reposar el frío. Además de ser algo relajante, también te hará sentir mejor.
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Toma un analgésico
Quizás si te duela más de lo que pensabas. Algunos analgésicos, disponibles en tiendas o farmacias, son una buena alternativa. No abuses de ellos. Dos para el día pueden ser buenos para relajarte y cuidarte de ciertos dolores.
