Tecnología

Un cohete guatemalteco: joven de 17 años motiva a expertos a unirse a programa espacial y lanzan primer prototipo

El grupo del Programa Aeroespacial Guatemalteco (PAEGUA) lanzó recientemente el prototipo Obsidian I, para crear el primer cohete orbital guatemalteco.

Durante el lanzamiento del primer prototipo de un cohete que espera llegar al espacio.  (Foto Prensa Libre: Paegua)

Durante el lanzamiento del primer prototipo de un cohete que espera llegar al espacio. (Foto Prensa Libre: Paegua)

Leonel Osuna, director y fundador de PAEGUA, es un joven guatemalteco que ha soñado con convertir a Guatemala en un lugar que entre a la industria espacial y que tenga sus propios cohetes.

Sí, Osuna habla de los famosos cohetes que son los vehículos construidos para viajar fuera de la atmósfera terrestre y que pueden transportar exploradores, satélites, suministros, astronautas y otros elementos llamadas cargas útiles.

“Muchas personas sueñan con ir al espacio, yo he querido ser la persona que cree las máquinas que cumpla ese sueño para ellos y que mandemos astronautas guatemaltecos al espacio”, dice con determinación este joven que está dando los primeros pasos para este gran objetivo.

En unos meses logró reunir a un grupo multidisciplinario de casi 40 profesionales entre ingenieros, artistas, personas que conocen de mercadeo, entre otras áreas.  Juntos tienen el objetivo de desarrollar tecnología aeroespacial e incentivar este campo en Guatemala.

El grupo está teniendo sus primeros logros. El 17 septiembre a las 14 horas se llevó a cabo el lanzamiento del primer prototipo llamado Obsidian I, en Michatoya Pacífico, en Escuintla. 

Más del primer lanzamiento

Ese día de septiembre, los integrantes que asistieron gritaron de alegría y aplaudieron mientras veían que su primer prototipo llegó a  despegar unos metros.   “Era una sensación de nostalgia y de impresión, nueve meses de trabajo”, dice Leonel.

Por ahora, Obsidian I es un pequeño cohete de 65 centímetros de altura y 8 centímetros de diámetro. La gran finalidad es que llegue a ser de 20 a 30 metros hasta alcanzar una altura ideal de 100 kilómetros de altura y la órbita del planeta.  El primer prototipo alcanzó una altura de cinco metros.

A partir del siguiente día del lanzamiento de Obsidian I, ya trabajan en la siguiente versión estudiando toda la información obtenida durante el primer despegue y esperando que se alcance una mayor altura y tenga un mejor desempeño, también se espera que tenga un tamaño más grande.

Leonel y Mario Osuna, hermanos y fundadores de PAEGUA. (Foto Prensa Libre: PAEGUA)

No se sabe con exactitud cuánto tiempo tardará esta creación, pero el grupo quiere que sea una realidad en 2024 y lanzar el primer cohete orbital de Guatemala que como ya se hace en otros países lleve cargas útiles al espacio (aquello que transporta la nave con finalidad de experimentación o estudio para la iniciativa pública, privada o para otros estudios profesionales).

Durante el despegue de Obsidiana I, durante septiembre de 2022. (Foto Prensa Libre: PAEGUA)

“Queremos aportar un grano de arena en la perspectiva de la ciencia y la tecnología en el país”, dice Osuna.

El comienzo

Osuna buscaba un club o unirse a un grupo que trabajara el tema especial en el país. Por su edad y debido a que todavía no estaba en la Universidad no encontró eco, así que decidió lanzarse a esta aventura por sus propios medios.

Esto pasaba mientras en Guatemala ya empezaban a escucharse iniciativas como la creación de Quetzal 1, el primer satélite guatemalteco, enviado al espacio por la Universidad del Valle de Guatemala (UVG).

Leonel lanzó una convocatoria a través de redes sociales para encontrar a expertos y voluntarios que quisieran trabajar en este sueño.  Se hicieron entrevistas y al final se formó un grupo que dio vida al Programa Aeroespacial Guatemalteco.   Actualmente el equipo tiene 33 personas, entre ellas 21 estudiantes universitarios, cinco estudiantes de colegio y siete profesionales.

La fecha de fundación es el 25 de octubre de 2021.  Mario Osuna, vicepresidente de PAEGUA, agrega que el principal objetivo es no solo crear los primeros cohetes guatemaltecos sino a futuro ser una industria en crecimiento que ofrezca nuevas tecnologías espaciales.

“Lo que tenemos con Obsidian I es un gran logro después de no contar con nada de equipo”, recuerda Leonel.  Actualmente los voluntarios se dividieron en siete especialidades: propulsión, aerodinámica, aviónica y telemetría, sistemas, marketing, se tiene reuniones semanales con los líderes mientras en la semana se va avanzando en el proyecto.  Cada uno dona su tiempo libre para trabajar en este proyecto.

Por el momento se cuenta con alianzas con otras instituciones que han apoyado con el primer prototipo, pero no se tienen inversionistas a este sueño.  La mayoría de fondos han sido aportes del equipo, en total de este primer prototipo fueron más de Q6 mil.  Se buscan apoyo económico y les gustaría tener un lugar u oficina donde trabajar y ensamblar.

Por ahora, en su página web www.paegua.com se tiene información de cómo ha caminado esta iniciativa y un espacio para los interesados en colaborar.

Leonel este año cierra cuatro bachillerato y está entusiasmado con graduarse y luego quiere seguir en la universidad ingeniería mecánica.  Su meta es quedarse en Guatemala para seguir el proyecto.

El joven guatemalteco reconoce que por ahora es una idea que empieza a tomar forma, pero junto a su equipo buscan ser reconocidos a nivel internacional.

 

ESCRITO POR:

ARCHIVADO EN: