El robot, diseñado para comunicarse con los humanos y hacer compañía a los tripulantes de la EEI, llegó a la plataforma en agosto de 2013, donde permaneció 18 meses, y mantuvo su primera conversación con el astronauta japonés Koichi Wakata en diciembre del mismo año, concretamente, a 414, 2 kilómetros sobre el nivel del mar.
Características
Este pequeño autómata de 34 centímetros de altura y aproximadamente dos libras y media de peso forma parte de un proyecto conjunto del Centro de Investigaciones para Ciencia y Tecnología Avanzadas (RCAST) de la Universidad de Tokio, la empresa Robo Garage y la Agencia Aeroespacial nipona (JAXA).
Entre sus funciones incluye reconocimiento de voz, procesamiento de lenguaje natural, síntesis de voz, funciones de telecomunicaciones, gestos, reconocimiento facial y grabación de video.
Kirobo, que también participó en el encuentro, regresó a la superficie terrestre en febrero de este año a bordo del carguero CRS-5 Dragon de la empresa norteamericana de transporte aeroespacial SpaceX.
Sus primera palabras fueron: “Desde arriba la Tierra brilla como un LED azul”, según el comunicado difundido por Toyota Motors.