Estos dos nuevos “smartphones” son de algo menor tamaño (5,2 y 4,6 pulgadas) que el XZ Premium, pero disfrutan también de altas prestaciones: procesador Snapdragon 835, cámara trasera de 19 megapíxeles y batería de 2.700 mAh.
Pero la mayor novedad que encierran estos aparatos es el “3D creator”, un software exclusivo que escanea caras u objetos en tres dimensiones con la cámara y puede aprovechar el resultado para crear imágenes tridimensionales, fondos de pantalla o las instrucciones para una impresión 3D.
Ambos teléfonos se pondrán a la venta a lo largo de septiembre en todo el mundo, según Sony, que no indicó los precios del XZ1 y XZ1 Compact.
Una cámara que sorprende
La japonesa, fiel a su tradición en el ámbito de la imagen, presentó asimismo la RX0, una cámara compacta (6 x 4 cm.) de cuerpo rígido, resistente a golpes y al agua (hasta 10 metros), que puede grabar en alta definición y está diseñada para trabajar en un sistema multicámaras.
La RX0 tiene una apertura de foco de 4.0, una velocidad de obturador máxima de 1/32000, un sistema de grabación a cámara ultra lenta (960/100 imágenes por segundo) y una capacidad para disparar hasta 16 fotos por segundo.
Sony presentó además un altavoz inteligente que incorpora el asistente por voz de Google, unos auriculares inalámbricos que se introducen en la oreja (WF-1000X) y otros con arco sobre la cabeza con optimización de la presión atmosférica, sistema de cancelación de ruido y distintos modos de escucha (WH-1000XM2).
Sony obtuvo un beneficio de 80.900 millones de yenes (734 millones de dólares) en el segundo trimestre, casi cuatro veces más en términos interanuales, gracias a la recuperación de sus sectores de imagen y semiconductores.
La IFA es una de la citas tecnológicas más importantes del mundo, junto al CES de Las Vegas y al Mobile World Congress de Barcelona, que este año se celebrará entre el 1 y el seis de septiembre.
El 2016 generó un volumen de negocio de 4.500 millones de euros (2.369 millones de dólares), según sus organizadores.