Resequedad y arrugas
La dermatóloga Patricia Chang, del hospital Ángeles, explica que cuando pasan los años se va perdiendo la cantidad de agua y grasa de la piel, por lo que se vuelve más reseca; además, pueden surgir pequeñas arrugas y la dermis se torna escamosa, lo que causa picazón sin que esté enferma.
De ello la importancia de lubricarla, evitar el uso de jabones agresivos y bañarse con agua tibia.
Protector solar
Su aplicación previene los riesgos de cáncer de piel, e incluso vejez prematura; se ha determinado una asociación entre el sol y factores genéticos como condicionantes para perder la lozanía de la piel.
De ahí que muchos dermatólogos consideren que no existen cremas milagrosas que resuelvan el deterioro normal de la piel, pero sí para la prevención de los rayos ultravioleta.
Otros factores
La piel tiende a ser susceptible al frío y desarrollar acné con los cambios hormonales antes de la menopausia y en el embarazo. Además de las alergias que provoca el consumo de ciertos medicamentos y el sobrepeso, entre otros padecimientos.
Lo mejor para tener estos inconvenientes a raya es someterse regularmente a una revisión médica, y cumplir con las indicaciones que sugiere el especialista.
Alimentación y ejercicio
La instructora Mara Hernández, del Centro de atención al adulto mayor, indica que beber suficiente agua y hacer ejercicios contribuye a mantener la elasticidad de la piel y eliminar las toxinas, lo que da como resultado una dermis reluciente y buen estado anímico.
Así que vale la pena adoptar estos hábitos de vida, sin importar la edad que se tenga, obviamente con la aprobación de su médico.
Equilibrio emocional
Sin embargo, la apariencia externa no lo es todo; la mujer también debe alcanzar equilibrio interior, para lo cual es necesario la paz y la autoestima. ?De nada vale mantener una apariencia juvenil si el interior está vacío, o las metas planteadas no son logradas y hay un profundo sentimiento de soledad?, sostiene la psiquiatra Alejandra Flores.
Cosméticos
Patricia Molina, asesora de belleza, hace ver que muchas mujeres de 40 años o más, continúan su rutina de maquillaje, lo cual es aceptable, pero se debe modificar algunos procesos para su aplicación, sin olvidar que todos los días, por la mañana y noche, hay que limpiar, tonificar y humectar. Los expertos en belleza coinciden en que lo mejor es estar consciente de que mientras más años se cumplan, menos maquillaje se debe usar.
Base
Pensar en cubrir las incipientes arrugas con maquillaje es un grave error. El primer paso es aplicar una base, que no sólo cumpla con la función estética sino también proteja la piel y proporcione una textura uniforme.
El exceso de producto pronuncia más las arrugas e impide al cutis respirar. Así que adquiera productos que le garanticen calidad, aptos para su piel, dice Rossana García, cosmetóloga del salón de belleza Roxanne.
Hidratación
Después de los 40 años, la piel necesita más hidratación, y no sólo en el rostro, contorno de ojos y cuello, sino también en manos, piernas y cuerpo; una piel limpia e hidratada responde de inmediato a los cuidados diarios. En los cutis maduros se debe utilizar cremas especializadas.
Por ejemplo, una piel más seca puede nutrirse con productos derivados de germen de trigo, sueros con proteínas y vitaminas, agrega Molina.
Ojos y labios
Para el primer caso, el maquillaje debe ser discreto. Se pueden aprovechar las nuevas sombras cremosas, muy ligeras y que no se acumulan sobre los párpados. Evite el exceso de rímel en las pestañas, ya que envejece.
Los productos con extracto de papa son efectivos y nutritivos, y no está de más refrescar los ojos con pepino o té de manzanilla. En el caso de los labios, se adelgazan y aparecen pequeñas arrugas en sus contornos, por ello utilice cremas y tratamientos rehidratantes especialmente formulados para esta zona.