Por tal motivo, desde hoy al 25 de noviembre, las organizadoras implementarán talleres, foros, debates y exposiciones de arte. Además, brindarán un espacio para promocionar a mujeres emprendedoras.
“El objetivo es visibilizar el problema de la violencia contra la mujer, pero no basándonos en las estadísticas, sino ofrecer una alternativa a través de la educación”, dijo Valeria Ayerdi, integrante del colectivo.
Durante el festival, las organizadoras desarrollarán 22 actividades diferentes, las cuales son apoyadas por tres patrocinadores. En estas se tendrá la presencia de lideresas y emprendedoras con las que se busca inspirar a otras. Además, esperan lograr una reflexión y cambio de actitud en hombres.
“Hablaremos de liderazgo, política, emprendimiento y no de cómo nos trata la sociedad, porque queremos presentar alternativas. De nada sirve la victimización. Debemos salir adelante y queremos mostrarle a las mujeres que todas hemos sufrido de alguna manera de esta violencia que es sistemática y endémica, pero totalmente patriarcal. Todas la hemos sufrido. Debemos unirnos para cambiar las cosas”, agregó Ayerdi.
El primer taller será hoy, a las 16 horas, sobre feminismo internacional. El próximo 10 de noviembre se tendrá un conversatorio sobre liderazgo estudiantil, ambos en Casa No’j y el 18, el foro sobre la coyuntura política nacional desde la perspectiva de las mujeres. Los otros foros serán sobre emprendedurismo y se contará con mujeres empresarias.
“En la coyuntura política la mayoría de veces solo exponen hombres, pero las mujeres también tenemos algo importante que decir. Sobre los líderes estudiantiles tendremos mujeres que son referentes para promover también la participación de las jóvenes”, dijo Pilar Bagur, integrante del colectivo.
Emprendedoras
Durante las actividades también se dispondrá de los espacios de Casa No’j para que mujeres emprendedoras expongan sus productos. Quienes deseen participar, la oportunidad es gratuita, y debe contarse con las organizadoras. El objetivo es apoyar las actividades económicas de las mujeres y eso también contribuye a romper el círculo de la violencia, pues en muchos casos esta es desde la dependencia económica.