El grupo ha causado destrozos y saqueado el área de talleres del proyecto hidroeléctrico. Estas acciones violentas se han incrementado desde el 12 de octubre recién pasado.
Según reportes, la turba destruyó la tubería de conducción, geomembrana, geotextil y robaron cemento, acero de refuerzo y otros materiales.
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Según pobladores que no se identificaron, los actos vandálicos fueron planificados desde el miércoles último.
Añadieron que el ambiente en el área se mantiene tenso, ya que este grupo atemoriza a pobladores.
Afirmaron que un bus procedente de Yulchén Frontera llevó al grupo que causó destrozos. Al parecer las personas que están armadas nuevamente bloquearán la Franja Transversal del Norte, lo que afectará la locomoción de muchas personas.
Acuerdo firmado
El documento del acuerdo establece líneas de acción para que haya presencia del Estado en el municipio y contrarrestar la violencia que ha afectado durante varios años al lugar, en especial desde el 2014, cuando varias personas resultaron heridas de bala en un enfrentamiento con pobladores que se oponen a los proyectos hidroeléctricos en el lugar.
La hidroeléctrica, instalada en Ixquisis ha denunciado varios ataques, que de forma sistémica en los últimos meses, han afectado los bienes de la empresa e incluso uno de sus empleados murió baleado cuando regresaba a su vivienda, en octubre pasado.
Las comunidades también han sido impactadas por la obstaculización de la movilidad, por grupos de hombres armados que bloquearon el paso en la Franja Transversal del Norte, durante varios días.
El 8 de este mes, el obispo de Huehuetenango, Álvaro Leonel Ramazzini, firmó el acuerdo de paz como testigo de honor.
“Admiro el valor de la energía espiritual de los pueblos indígenas, que a pesar de todos los siglos de exclusión, de miseria, está unida a una sabiduría ancestral, elemento fundamental en este país, donde la mayoría es indígena”, dijo el religiosos en esa ocasión.
Obispo se pronuncia
Este jueves en programa de una radio local, Ramazzini dijo ha recibido información de que el grupo en contra de la hidroeléctrica quiere hacer algo contra su persona; “hablaban, yo no lo sé, de lincharme, hablaban de aprehenderme. Uno se pregunta por qué contra mí, por qué no tienen una actitud de reacción contra los diputados al Congreso de la República, no digo de cólera, digo de reacción, exigiéndole a los diputados que cambien la ley de electricidad”, manifestó el obispo.
Añadió que por la situación decidió no presentarse a la sede parroquial de San Mateo Ixtatán.
“Dios es el dueño de mi vida y a mí la muerte me puede llegar en cualquier momento y de cualquier modo, sobre todo cuando uno maneja en estas carretas y con tantos chofer imprudentes”, enfatizó Ramazzini, quien dijo que no se pondrá en riesgo.
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Resaltó que está a favor de la gente empobrecida y marginada, pero no está a favor de la violencia, ni a favor de proyectos que no ayuden a resolver la situación de pobreza en San Mateo Ixtatán.
“Estoy a favor de un desarrollo integral, estoy decidido a apoyar lo que ayude a salir de la pobreza y que evite la migración hacia al norte. Habrá gente que me crea y gente que no me crea”, recalcó.
Presume que el acuerdo de paz firmado no ha sido plenamente conocido.
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