
“Le hacemos un llamado a Pérez Molina para que enfrente a la justicia y asuma su responsabilidad ante los casos de corrupción e inestabilidad política; además, instamos al occidente del país a seguirse pronunciando de forma pacífica en este momento histórico”, manifestó Aldo Herrera de SBX.
Los inconformes firmaron un manifiesto que será trasladado al movimiento JusticiaYa en la capital, con el fin de apoyar la petición de la población.
Juan Francisco Hernández, directivo financiero de la Cámara de Comercio Filial Quetzaltenango, indicó que mientras Otto Pérez Molina este en el gobierno habrá inestabilidad en el país y causará daños a la economía por alejar la inversión extrajera a causa de los actos de corrupción.
Estas reacciones surgen luego de que la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala y el Ministerio Público señalaran a Pérez de dirigir una estructura criminal denominada La Línea, la cual se dedicada a la defraudación aduanera.
El jueves último, empresarios de Xela apoyaron la protesta y entregaron pan agua pura y galletas a unos 10 mil quetzaltecos que manifestaron.
“Vamos a seguir en una resistencia pacífica, porque por primera vez el despertar de esta sociedad exige sus derechos”, expresó Siefren Méndez, de la Mesa Económica de Quetzaltenango.
Guatemaltecos se unen
La Plaza de la Constitución fue el principal escenario donde unas 100 mil personas exigieron este jueves la renuncia del presidente Otto Pérez Molina, sin embargo y aunque su permanencia al frente del Ejecutivo provocó un paro nacional, el mandatario aseguró que no renunciará.
Además de la capital, otros miles de ciudadanos protestaron de forma pacífica en la provincia, en actividades que se extendieron por más de ocho horas de manifestación.
Durante 17 sábados consecutivos de se habían desarrollado protestas pacíficas, pero este jueves se efectuó un paro nacional, en el que se sumaron guatemaltecos de todas las clases sociales y, sin importar la edad, rechazaron que Pérez Molina se mantenga en el poder luego de los señalamientos de corrupción.
Comercios grandes y pequeños también se sumaron al clamor nacional y el Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras, (Cacif), terminó por apoyar el paro nacional al instar a las empresas a permitir la participación de sus trabajadores en las actividades.