La leche es una fuente de salud y un alimento muy completo, entre sus componentes encontramos vitaminas A, B, C, D, potasio, magnesio, zinc, fósforo, yodo, rivoflavina y niacina.
Además de hierro, calcio y proteínas, la leche es de gran importancia para el crecimiento, desarrollo óseo y para una adecuada función muscular y de otros tejidos de nuestro organismo.
Esta es la leche recomendada por excelencia pues, eliminada la grasa aporta principalmente proteínas, carbohidratos, vitaminas y minerales.
Es aquella que no ha sido sometida a ningún proceso y, por lo tanto, no se recomienda tomarla sin hervirla, pues las bacterias que contiene pueden ocasionar serias infecciones gastrointestinales. Debe hervirse hasta que en su superficie se forme la nata.
Por su alto contenido de grasa es recomendada solo para niños, porque necesitan esa fuente concentrada de energía para el crecimiento y para el buen desarrollo del sistema nervioso.
¡Como será de buena que el bebé no necesita más! Proteínas, agua, lactosa, grasa, minerales y vitaminas se juntan en este líquido sagrado. Es mucho mejor tomar leche materna que otro tipo de leche artificial, ya que los bebés alimentados con ella son más capaces de combatir todo tipo de infecciones.
Método que se utiliza para destruir los microorganismos causantes de enfermedades, busca reducir el número de bacterias totales y mejorar la capacidad de conservación del líquido. La pasteurización tiene un efecto mínimo en el sabor o la calidad nutricional de la leche, y contribuye a incrementar su vida útil.
Al mezclarse con agua tiene una cantidad similar de proteínas, grasa, calorías y minerales que la leche fresca, aunque algunas vitaminas se destruyen durante el procesado térmico. Por ello, a veces se añaden vitaminas a la leche en polvo.
Esta leche ha sido sometida a un proceso industrial a través del cual se degrada la lactosa de la leche. Especial para personas con “intolerancia a la lactosa” que se caracteriza por cólicos, diarrea, entre otros síntomas.
Contiene solamente la mitad de las grasas, pero conserva sus propiedades nutritivas. Este tipo de leche se recomienda a las personas con tendencia al sobre peso.