Esta vitamina, sin embargo, posee diversas funciones, como combatir la obesidad y regular las hormonas, así como reducir los riesgos de hipertensión, diabetes, enfermedades cardiovasculares e incluso algunos tipos de cáncer.
Triplicar la dosis de vitamina D en los niños pequeños no tiene ningún efecto en sus huesos ni contra las enfermedades infecciosas, según un amplio estudio realizado en Finlandia.