Leonardo DiCaprio, que se dio a conocer en la pantalla grande con su papel de Jack en Titanic, aparecía en ese entonces con una figura delgada y estilizada que arrancó más de un suspiro a aquellas que por algún momento lo hicieron su sueño imposible.
Pero tras su primera aparición en el cine, actualmente DiCaprio luce una imagen poco atlética, al igual que Jason Sege o Ben Affleck .
Adam Sandler es otro de los actores considerados entre los fofisanos.
El origen
La incitadora de esta tendencia que consiguió explotar en la internet es Mackenzie Pearson, una estudiante de la Universidad de Clemson, que , un buen día, decidió, escribir un pequeño artículo en la web the Odyssey, sobre la atracción de las mujeres hacia el dad bob, es decir, el cuerpo de padre. A partir de ahí el boom del fofisano ha tomado auge.
Pero no todos están de acuerdo con este concepto, o al menos que se quede en estas prácticas. Para la revista Time, el problema de los fofisanos, no es lo que el concepto dice de los hombres, sino, de las mujeres.
Porque, si bien es un fenómeno nuevo, sí es un regreso al pasado antes de que llegaran los metrosexuales y los hípster. El fofisano pone de relieve el desequilibrio entre hombres y mujeres. Por ejemplo DiCaprio se pasea con su panza cervecera, pero a la par le acompaña una modelo de cuerpo escultural. Ella cuenta cada caloría y no se bajan de la cama de Pilates. Mientras el sigue cómodamente con su cuerpo y comiendo sin culpa. Dos ideas muy diferentes
“Mientras a todos nos encantan los chicos musculosos, hay algo en los fofisanos, que hace que los chicos parezcan más humanos, naturales y atractivos”, escribió Pearson.